La Fiscalía General de la Nación imputó a seis integrantes del Ejército de Liberación Nacional Eln, quienes presuntamente están vinculados en los múltiples secuestros a periodistas registrados en los últimos años.
'La Fiscalía General de la Nación identificó lo que sería una directriz del Eln, relacionada con ejercer presión y coartar la función informar de los periodistas que cuestionan y, en su concepto, lesionan los intereses de la organización', dijo el ente acusador.
De acuerdo con la Fiscalía, las pruebas recolectadas confirman que la 'instrucción'promovida por los jefes máximos de dicha guerrilla llegarían hasta los cabecilla regionales 'quienes incidirían en los medios de comunicación locales para que emitan información relacionada con actividades violentas, en medio de amenazas de retenciones de los periodistas o robo de los equipos de comunicación', dijo la Fiscalía.
En ese sentido, indicó el ente acusador que dicha instrucción habría quedado en evidencia en diferentes hechos registrados en la región del Catatumbo y que estarían asociados con el secuestro de Salud Hernández Mora, ocurrido el 21 de mayo de 2016, en El Tarra (Norte de Santander).
Las investigaciones de la Fiscalía confirmaron que la comunicadora recorría la zona y realizaba una investigación sobre la erradicación de cultivos ilícitos, y habría sido engañada por dos presuntos integrantes del ELN, quienes se comprometieron con devolver el material que el día anterior, 20 de mayo de 2016, otro grupo de personas le quitó a la comunicadora; pero en realidad se la llevaron hacia la vereda Buenos Aires, donde permaneció secuestrada durante siete días.
Posterior a estos hechos, aseguró el ente acusador que el 23 de mayo del mismo año el periodista Diego Alonso D´ Pablos y su camarógrafo, Carlos Alberto Calderón llegaron a dicha región a cubrir el rapto de la periodista española, lo que no sabían era que contarían con la misma suerte, estuvieron retenidos durante cuatro días, por el mismo grupo guerrillero.
Una situación parecida experimentó el reportero Diego Fernando Veloza Duque, quien era acompañado por dos locutores locales, William del Carmen Mora Trujillo y Zulay Ropero. Los comunicadores fueron retenidos durante un par de horas por miembros de dicha guerrilla.
La Fiscalía confirmó que un año más tarde, el 21 de mayo de 20017 los periodistas holandeses Derk Johannnes Bolt y Eugenio Ernest Marie Follender, fueron secuestrados en zona rural de El Tarra (Norte de Santander). Según las investigaciones, los extranjeros realizaban un documental y buscaban a los padres biológicos de niños adoptados por parejas holandesas y en medio de su labor periodística, guerrilleros del frente Héctor del ELN los interceptaron, les quitaron el material de sus entrevistas y los trasladaron en medio de amenazas a la vereda Filo Gringo, donde permanecieron en contra de su voluntad durante ocho días.
En ese sentido, 'para la Fiscalía, el constreñimiento y la obstrucción al derecho de informar de los periodistas en la región del Catatumbo, reafirmarían la existencia de la directriz del ELN, que sería de pleno conocimiento y consentimiento de los integrantes del denominado comando central (Coce) de esa organización'.
Por estos hechos fueron imputados cinco miembros del Comando Central entre ellos, Nicolás Rodríguez Bautista, alias ‘Gabino’; Eliécer Herlinto Chamorro Acosta, alias ‘Antonio García’; Israel Ramírez Pineda, alias ‘Pablo Beltrán’; Rafael Sierra Granados, alias ‘Ramiro Vargas’; Gustavo Aníbal Giraldo Quinchía o Carlos Marin Guarín, alias ‘Pablito’ y Jose Leinner Franco Pérez, alias ‘Barbas’ o ‘Marcos’, cabecilla del frente Héctor del Eln, quien es señalado de custodiar a los periodistas
secuestrados.
Sobre alias ‘Barbas’ el Juzgado Primero de control de garantías ambulante de Cúcuta (Norte de Santander) libró una orden de captura mientras que a las otras cinco personas se les imputó el delito de secuestro extorsivo y agravado, rebelión y hurto calificado y agravado.
