La Procuraduría General de la Nación destituyó e inhabilitó por diez años para ejercer cargos públicos a la profesora Elizabeth Montaña Hernández, tras comprobar que solía agredir verbalmente a un estudiante indígena de Vaupés.
El estudiante afectado tenía 14 años en el momento de los hechos y era integrante de la comunidad indígena Ceima de San Pablo, de la etnia Desano, el cual además era acosado por varios de sus compañeros en una institución educativa de Mitú.
'Se estableció que el 6 de octubre de 2017 la docente lo recriminó en presencia de sus compañeros con términos como 'ladrón' y 'que no servía para nada' y lo responsabilizó, sin tener pruebas, por la pérdida de una gasolina que estaba almacenada en las instalaciones del centro educativo. Ese mismo día, horas después de finalizada la jornada escolar, el joven se ahorcó. Su cuerpo fue hallado cerca de la sede del colegio', explicó el procurador delegado de la regional en su informe.
En la investigación del órgano de control se determinó que la mujer en varias ocasiones le prohibió la entrada al salón al menor y se abstuvo de intervenir para evitar que algunos de sus compañeros le hicieran matoneo.
'Montaña Hernández afectó la dignidad y la integridad del estudiante, así como incumplió sus deberes y funciones al no velar por el bienestar, seguridad e integridad del menor, ni por el cumplimento de las normas de comportamiento y convivencia de la institución', dice en uno de los apartes de la decisión.
El fallo fue apelado por la defensa de la disciplinada, recurso que será resuelto por la Procuraduría Delegada para la Vigilancia Administrativa.
