Por: Sergio Machler V
En una entrevista en La Habana, con el periódico estadounidense New York Times, Pablo Beltrán, vocero del Ejército de Liberación Nacional, ELN, en los diálogos para la dejación de las armas con el gobierno de Iván Duque, afirmó que el 'ambiente entre los dos bandos es bueno' y que dentro de muy poco se hará oficial la liberación de las 9 personas que tienen en su poder.
'Son cuatro soldados, tres policías y dos contratistas militares ' manifestó Beltrán, miembro de la cúpula del Eln, al ser preguntado por la identidad de cada una de las personas retenidas y que dejarán libre 'dentro de poco tiempo', aseguró.
Beltrán resaltó que con 'el gobierno del ex presidente Juan Manuel Santos avanzamos un 90% y dejamos casi listo el diseño para un nuevo cese al fuego bilateral'. Sin embargo, destacó, que su forma de proceder no es igualitaria a la de las Farc, debido que no están dispuestos 'ni a la desmovilización ni tampoco al desarme de armas'.
Por otro lado subrayó que tienen temor por todos los efectos secundarios que ha dejado la oficialización de la paz entre el gobierno y las Farc. 'Tenemos el ejemplo de esa agrupación y nos tiene un poco asustados, porque el Gobierno firma y luego sus niveles de incumplimiento son altísimos', resaltó.
'Las Farc se desarmaron formalmente el año pasado, pero cuando se conformó el partido político para competir en las elecciones, los asesinatos del personal de la campaña y los ataques contra los candidatos, incluido a su ex comandante,Rodrigo Londoño, lo forzaron a dejar de hacer las exposiciones de sus programas, en febrero'. Recordó que se han asesinado 76 excombatientes y algunos familiares de estos excombatientes.
'Un líder nos dijo que si el Eln firma un acuerdo nuestras comunidades, todos vamos a quedar desplazados, viviendo bajo puentes de Medellín y Pereira, y este territorio será asumido por compañías mineras multinacionales y firmas petroleras' indicó.
Sostuvo que 'cada día es más difícil garantizar el bienestar de cada una de estas personas'
Beltrán, finalmente, acentuó que es vital sacar la violencia de la política, para que el ser líder no signifique 'cargar una lápida en la espalda'. Sin embargo, dejó como mensaje global que durante los cuatro años del presidente Duque es 'muy posible que se logre un acuerdo'.
