Exnegociadores de paz y la Farc instaron este viernes al ELN a declarar un alto al fuego unilateral, pese a la decisión del gobierno de suspender los diálogos con esa guerrilla en Cuba.
'Hoy el país reclama de ustedes gestos categóricos que demuestren su voluntad de transitar con la mayor celeridad posible hacia el fin de la guerra', señalaron en una carta dirigida a los máximos jefes del grupo insurgente.
En la misiva publicada en las redes sociales, los exdelegados de paz reclaman al Ejército de Liberación Nacional (ELN, guevarista) 'un cese unilateral al fuego y de hostilidades', con motivo del Día Nacional de las Víctimas que se conmemora el 9 de abril.
Según los firmantes, la interrupción de las negociaciones con el ELN, iniciadas bajo el gobierno del expresidente Juan Manuel Santos (2010-2018), suponen un 'verdadero retroceso' en el proceso de 'solución definitiva' del conflicto colombiano de casi seis décadas.
En ese sentido, lamentaron el 'recrudecimiento de las hostilidades' en distintas zonas del país y aseguraron que son las comunidades afectadas las que reclaman que el proceso de paz 'se retome a la mayor brevedad'.
Además de los exnegociadores de paz, la carta fue suscrita por Rodrigo Londoño, jefe de la Fuerza Alternativa Revolucionaria de Colombia (FARC), el partido formado por la guerrilla marxista tras su disolución.
El presidente Iván Duque sepultó el moribundo proceso de negociación con el ELN iniciado en 2017, tras el atentado con coche bomba contra una academia policial en Bogotá, que dejó 21 jóvenes muertos, además del agresor.
Los insurgentes reivindicaron este ataque cometido el 17 de enero como una 'operación lícita' dentro de la 'guerra' que libra contra el Estado desde hace más de medio siglo.
Desde entonces Duque presiona a Cuba para que le entregue a los negociadores rebeldes que esperaban en La Habana la reactivación de las conversaciones.
Al mismo tiempo, intensificó la ofensiva contra el ELN, fuerza que cuenta con unos 1.800 combatientes y una extensa red de apoyo.
Surgida en 1964, la organización armada opera en una docena de los 32 departamentos colombianos.
