La Fiscalía y la Policía ocuparon bienes avaluados en $20.000 millones en Cartagena y Turbaco, Bolívar, algunos de ellos propiedades del exdirector de Cardique, Olaff Puello Castillo, investigado por la presunta deviación de $28.000 millones.
El ente acusador verificó varias alertas hechas por la Contraloría que daban cuenta de presuntas irregularidades en el manejo de recursos en la Corporación Autónoma Regional del Canal del Dique, Cardique, y detectó 220 contratos que habrían sido suscritos irregularmente en 2016.
'Nunca se cumplió con el objeto de los citados contratos que contemplaban obras de limpieza y mantenimiento de arroyos, caños y reservorios, y parte de los $28.000 millones destinados para la ejecución, al parecer, terminaron en manos del entonces director de la Corporación, Olaff Puello Castillo, y algunos de sus colaboradores y contratistas en la entidad', indicó la Fiscalía en un comunicado.
También se identificaron por parte de las autoridades 104 bienes 'que habrían sido adquiridos por los investigados durante el tiempo en el que ocurrió el ilícito o con los dineros que, supuestamente, estaban destinados para la ejecución de los contratos'.
Por ello la Dirección Especializada de Extinción del Derecho de Dominio impuso medidas cautelares de embargo, secuestro y suspensión del poder dispositivo sobre 43 bienes inmuebles, 35 vehículos y 26 sociedades que figuraban a nombre de los exfuncionarios y contratistas.
Las diligencias de ocupación se cumplieron en los barrios cartageneros de Crespo, Bocagrande, Torices, Manga, La Castellana, Tacarigua, Ciudad Jardín, Villa Grande, Ternera, La Plazuela y otros sectores de Cartagena y Turbaco.
Entre los bienes afectados sobresale el inmueble en el que el exdirector de Cardique, Olaff Puello Castillo, cumple le medida de detención domiciliaria que le otorgó un juez de control de garantías.
Los dueños de los bienes ocupados fueron capturados y judicializados en mayo de 2018, por su presunta participación en la desviación de casi $28.000 millones a través de la celebración de 220 contratos.
Puello, director de Cardique, fue imputado por los delitos de peculado por apropiación agravado por la cuantía, contrato sin cumplimiento de los requisitos legales, acuerdos restrictivos de la competencia y concierto para delinquir.
Katherine Martelo, subdirectora de Planeación de Cardique, fue imputada por peculado, contrato sin cumplimiento de los requisitos legales, acuerdos restrictivos de la competencia y concierto para delinquir.
Saray Hernández, funcionaria de Cardique y supervisora de los contratos, fue judicializada por los delitos de peculado, contrato sin cumplimiento de los requisitos legales, acuerdos restrictivos de la competencia y concierto para delinquir.
Dalis Herrera, funcionaria de Cardique y supervisora de los contratos, fue imputada por los delitos de peculado, contrato sin cumplimiento de los requisitos legales, acuerdos restrictivos de la competencia y concierto para delinquir.
Bernabé Maldonado, contador que habría participado en la articulación de los contratos, fue judicializado por peculado por apropiación, contrato sin cumplimiento de los requisitos legales, acuerdos restrictivos de la competencia, concierto para delinquir, y falsedad en documento privado.
Fredy Javier Rodgers, topógrafo, fue imputado por peculado, concierto para delinquir y falsedad en documento privado.
