El presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia, monseñor Óscar Urbina, pidió serenidad tras el anuncio de Márquez y compañía, dijo que acompañarán a los exguerrilleros que se mantienen en la vida civil, rechazó el camino de las armas de los disidentes y recordó el mensaje de paz del papa Francisco en su visita a Colombia.
'Esta coyuntura nos pide una reflexión serena y ponderada, con la mirada puesta en el bien de todos, sobre los pasos que hemos dado, lo que debemos asumir y corregir, así como lo que nos falta para alcanzar la reconciliación y la paz', dijo.
Recordó el arzobispo de Villavicencio el mensaje del papa Francisco en su visita al país: 'Hace dos años el papa Francisco nos dijo 'no se dejen arrebatar la esperanza'. Hoy se impone con mayor fuerza la exigencia de trabajar juntos por la paz'.
Alentó a los exguerrilleros que siguen en el proceso: 'Animamos y acompañamos a todos aquellos que por medio del diálogo y la negociación se decidieron por la reincorporación a la vida civil y democrática, y se mantienen firmes en ella'.
Y concluyó la lectura del comunicado de la Conferencia Episcopal con que 'la paz es posible si verdaderamente la queremos, y si la paz es posible es un compromiso de todos'.
Finalmente, advirtió el religioso que 'las armas y la violencia solo engendran destrucción, dolor y muerte', y rechazó la salida armada: 'No hay nada que justifique recurrir a la guerra con fines ideológicos'.