Las autoridades atribuyeron a las disidencias de las Farc el atentado terrorista con carro bomba contra la estación de Policía de Santander de Quilichao, en el Cauca, que dejó tres uniformados muertos, siete más heridos al igual que tres civiles.
El acto terrorista se registró en la noche de este viernes.
Óscar Campo, gobernador del Cauca, repudió el hecho criminal al mismo tiempo que informó que el atentado fue perpetrado utilizando un camión NPR, desde el cual fueron lanzados cuatro cilindros bomba, dos de los cuales les no explotaron.
Los uniformados que fallecieron en el ataque terrorista fueron identificados como Ever Danilo Canacuan Cuaical, de Cumbal, Nariño; Jesús Norbey Muelas Ipia, de Piendamó, Cauca; y Roy Valentino Gallyadi Fernández, de Popayán.
Los policías y civiles que resultaron heridos fueron llevados a diferentes centros asistenciales de Cali.
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El ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo, aseguró que la onda explosiva provocó daños en viviendas cercanas habitadas por civiles.
Jaime Asprilla, secretario de Gobierno municipal dijo que 'es un atentado de grupos organizados que manejan recursos y que tienen que ver con el tema de la drogas' en el convulso departamento del Cauca, del que Santander de Quilichao hace parte, señaló el funcionario.
Asprilla aseguró que la alcaldía decretará toque de queda hasta el domingo para garantizar el orden público y la seguridad de los habitantes.
Además de los disidentes de las Frac, en la zona hacen presencia guerrilleros del ELN y bandas narco de origen paramilitar que se disputan el control territorial del Cauca, que tiene miles de hectáreas sembradas de narcocultivos y es una salida estratégica de droga por el Pacífico con rumbo a Estados Unidos.
Esa región, con fuerte presencia indígena y negra, ha sido epicentro reciente de asesinatos selectivos contra líderes sociales, guardias indígenas y activistas.
