Jorge Ignacio Pretelt Chaljub se convirtió este miércoles en el primer exmagistrado condenado por corrupción, luego de que la Corte determinara que este habría exigido $500 millones al abogado Víctor Pacheco, quien representaba a la firma Fidupetrol, con el fin de favorecer a dicha empresa en el trámite de una tutela en la Corte Constitucional.
En un fallo de 96 páginas, donde se lee la condena que dictaminó la Sala Especial de Primera Instancia de la Corte Suprema de Justicia contra Pretelt, se exponen los argumentos que dio el alto tribunal para tomar tal decisión.
'Víctor no mintió'. Uno de los aspectos que tuvo en cuenta el tribunal de Justicia para la condena fue probar si el testimonio de Víctor Pacheco, el cual refería que Pretelt le habría solicitado la suma de 500 millones de pesos para que seleccionara una tutela interpuesta por Fidupetrol, era veraz o no, puesto que la defensa del exmagistrado había intentado 'descalificarlo y tildarlo de mentiroso'.
La Corte explicó que si bien en las primeras declaraciones Pacheco no había hecho mención de los $500 millones, en varias versiones aludió 'al mecanismo o fórmula que, según el acusado Pretelt Chaljub, tenía previsto para sacar adelante la tutela en la que el litigante estaba interesado'.
Además, en este sentido, el tribunal de justicia indicó que 'el hecho de que un testigo por diversas razones haya realizado diferentes intervenciones, relacionadas con un mismo acontecimiento y estas no coincidan, ello no implica de manera automática que aquél declara algo ajeno a la verdad'.
Así mismo, la Corte retomó la intervención del representante de la parte civil cuando este afirmó que 'si alguien ha hecho manifestaciones mentirosas no habría necesidad de enviar un emisario para indicarle que guarde silencio o que en todo caso matice las mismas'.
Según el representante de la parte civil, Pretelt habría enviado al entonces fiscal delegado ante el Tribunal de Barranquilla Fernando Mendoza como emisario para intentar persuadir al testigo de que matizara su versión de lo ocurrido.
Otro de los argumentos que expuso la Corte es que 'no se advierte ningún interés de Víctor Pacheco para mentir'; ya que tales declaraciones servían para que él mismo fuese penalmente imputado, a tal punto que el representante de Fidupetrol fue condenado y purgó una sanción impuesta.
'Bien pudo haber guardado silencio y evitar así su cuestionamiento no solamente penal, sino social y familiar. Por lo demás, recuérdese que fue expuesto a valoración psiquiátrica sin que ningún trastorno se hubiese detectado por los profesionales. (...) Victor Pacheco pudo simplemente guardar silencio, posición cómoda que además lo hubiese librado de su judicialización', expresó la Corte Suprema en el fallo.
La sesión del 2 de marzo de 2015. Otro de los puntos claves, en sentido probatorio, que citó el tribunal de justicia fueron las manifestaciones de Pretelt, en calidad de magistrado, en la sesión del 2 de marzo de 2015 en la Corte Constitucional.
Este fue uno de los puntos que la defensa refirió como una estrategia para generar una prueba ante la Comisión de Acusaciones, dado que según ellos no existía algún otro elemento probatorio que comprometiera al exmagistrado, más allá que el testimonio de Víctor Pacheco.
Sin embargo, sobre esto, la Corte Suprema precisó que solo hasta el 3 de marzo de 2015 (un día después de la sesión extraordinaria) el representante investigador ordenó la indagación preliminar y la práctica de pruebas, 'de modo que no se conocían mayores detalles de lo que supuestamente había acontecido, mucho menos que los demás integrantes de la Sala hubiesen dispuesto una estrategia para poder incriminar a su compañero'.
Pero, además, la Corte Suprema de Justicia indicó que si se hubiese tratado de una 'estrategia defensiva' no sería lógico que ninguno de los testimonios de los demás magistrados de la Corte Constitucional no hubiesen sido 'exagerados'. La Corte recordó que, por el contrario, estos manifestaron que Pretelt no les insinuó o realizó propuestas indebidas en el trámite de la tutela de Fidupetrol.
Así mismo, la Corte detalló que entre otros argumentos que expone la defensa para intentar probar que Pretelt no es culpable del delito que se le impugna, varios de estos se refieren a conductas 'posdelictuales', como el hecho de que el exmagistrado no fue quien seleccionó la tutela en cuestión, que no insinuó a los demás magistrados cómo deberían votar y que votó en contra de los intereses de Fidrupetrol. Lo anterior, teniendo en cuenta que por su entonces condición como magistrado, aunque no hubiese recibido el dinero, no debió solicitarlo. Por ende, la Corte Suprema de Justicia lo responsabilizó del delito de concusión.
'No se trata entonces de abstenciones bienintencionadas del entonces magistrado Pretelt Chaljub, sino, por el contrario, de una habilidosa forma de actuar para mantener a la sombra su repudiable comportamiento delictivo', como se lee en el fallo.
Y aunque Víctor Pacheco incluso manifestó que no se trataba de un pedido de 500 millones de pesos, 'sino de unos regalos para el hijo y esposa de Mauricio González (magistrado ponente de la tutela en cuestión)', según la Corte, tal situación 'en nada distorsiona la tipificación de tal comportamiento'. Esto, según señaló el alto tribunal, porque de acuerdo al Código Penal tal delito no se condiciona así el beneficio no fuese para sí mismo sino para un tercero.