Un rifirrafe epistolar han protagonizado el exvicepresidente Germán Vargas Lleras y el veedor del patrimonio cultural sumergido, Francisco Muñoz, por la reciente declaratoria del Galeón San José como Bien de Interés Cultural de la Nación.
A finales de diciembre pasado, la vicepresidenta Marta Lucía Ramírez anunció que el Consejo Nacional de Patrimonio había tomado la decisión de la declaratoria para que el rescate, contratado con la cazatesoros inglesa MAC, no se pague con piezas de tesoro sino con dineros que se buscarían, entre otros, de la cooperación internacional.
Al respecto, hace un par de días Vargas Lleras, en su columna del diario capitalino 'El Tiempo', advirtió varios cuestionamientos: '¿Algún filántropo confiable y con experiencia ha manifestado intención de proceder al rescate? ¿En qué condiciones? ¿Gratis? ¿Es cierto que se vienen adelantando conversaciones con el Gobierno español? ¿Conserva o no ese gobierno alguna pretensión sobre el galeón? ¿Mantiene España en este caso su postura oficial, que concuerda con la norteamericana en el sentido de que un Estado ostenta la propiedad de sus buques sin importar cuándo o dónde se hundieron?'.
Así mismo, se preguntó que si el Gobierno iba a asumir el costo del rescate, estimado en US$70 millones, '¿por qué en el Presupuesto General de la Nación no se contempló ninguna partida para este propósito?'.
También se cuestionó sobre si con la decisión '¿estará el Gobierno desconociendo los términos de la ley de especies náufragas y los pronunciamientos de las altas cortes? ¿Estará el Gobierno exponiéndose a millonarias demandas internacionales?'.
Y puso de presente, por último, su preocupación por un posible saqueo del tesoro mientras se espera resolver el rescate.
A lo que Muñoz, mediante un comunicado, respondió invitando al exfuncionario que 'aporte ideas o por lo menos a que no estorbe y más bien observe actuar al gobierno del doctor Iván Duque y aprenda cómo, cuando hay buena voluntad, lo ideal termina siendo amigo de lo bueno'.
Ante la primera pregunta, de quién costeará el rescate, el veedor señala que 'aquí no se necesitan filántropos doctor Vargas, ni Colombia tiene que esperar que le den nada gratis para desarrollar un proyecto absolutamente rentable y claramente autosostenible (investigue un poco sobre el Museo Vasa en Estocolmo -más de 1,5 millones de visitantes por año-)'.
Propone así mismo 'considerar que los proyectos de la nación también pueden tomarse el tiempo que sea necesario, sin apresurarse para evitar locuras en la toma de decisiones, pues ni el Estado, ni en este caso el proyecto del Galeón Señor San José, pueden acelerarse para satisfacer intereses particulares'.
Y, finalmente, dice que la Armada salvaguardará la ubicación de los tesoros y confirmó que 'es cierto que la Unesco se ofreció a colaborar con Colombia en el proyecto, al igual que la Fundación del Mar de Francia y varias universidades internacionales y que estos ofrecimientos se dieron en tiempos del gobierno anterior'.