El relator para la Onu, Michael Forst, presentó su reporte oficial ante la organización internacional, sobre la situación de los defensores de derechos humanos y líderes sociales en el país.
Forst recordó su visita en noviembre y diciembre de 2018 e hizo énfasis en que 'en los últimos años, el Estado, en colaboración con la sociedad civil, ha realizado importantes esfuerzos para tratar de mejorar su marco jurídico e institucional a fin de crear un entorno seguro y propicio para la defensa y promoción de los Derechos Humanos, y desde 2009 se estableció el proceso del mecanismo nacional para salvaguardar la labor de defensores y dirigentes sociales y comunitarios, que incluye un diálogo permanente entre sociedad civil y Gobierno en la denominada Mesa Nacional de Garantías y las 14 Mesas Territoriales'.
Sin embargo, señala que a pesar de esos esfuerzos los defensores en el país siguen en peligro.
'Los riesgos a los que se enfrentan han aumentado en los tres años transcurridos desde la aprobación del Acuerdo de Paz (…) los más expuestos son los dirigentes sociales que defienden los Derechos Humanos en las zonas rurales, en particular los que aplican el Acuerdo de Paz y los que defienden los derechos sobre la tierra y el medio ambiente y los derechos de las comunidades étnicas y afrocolombianas'.