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La lucha por los derechos de los trabajadores. Esa es la labor que caracterizó en vida a Julio Roberto Gómez, no en vano estuvo al frente de la Confederación General del Trabajo (CGT) de Colombia por casi 40 años.

Esa labor fue destacada este martes por cientos de líderes de diversas ideologías, instituciones multilaterales y el Gobierno nacional, luego de conocerse su fallecimiento tras complicaciones por la covid-19 en una clínica de Bogotá.

'Julio Roberto fue un convencido de la defensa de los derechos de los trabajadores. Fue un convencido de que este país necesitaba muchas transformaciones, pero también fue un convencido de la movilización y la lucha civilizada. En los últimos años fue un convencido de la unión entre los diferentes movimientos sindicales', señaló a EL HERALDO Diógenes Orjuela, presidente de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), otra central obrera de tradición nacional.

Nacido hace 70 años en el municipio de Cachipay, perteneciente al departamento de Cundinamarca, Gómez comenzó a trabajar antes de la mayoría de edad como operario en una tipografía.

Su vinculación con la CGT se remonta a antes de 1990, año para el cual se postuló sin éxito a la Asamblea Nacional Constituyente.

En el ámbito personal, Orjuela recuerda a su colega sindical como 'un hombre de un buen humor' y de una 'actitud impecable al vestir'. Quizás de ahí las razones para comprender las fotografías antiguas donde Gómez aparecía vestido de punta en blanco gritando consignas con un megáfono en una concentración popular. 'El no se quitaba la corbata para nada', recordó Orjuela.

Faceta sindicalista

A Julio Roberto Gómez se le recordará por ser una importante figura sindicalista que dentro del CGT estuvo al tanto de los salarios de los trabajadores colombianos.

Fue integrante de la Comisión Permanente de Concertación de Políticas Salariales y Laborales (CPCPSL) desde su creación en 1996, destacándose por su tono conciliador en las mesas de concertación por el salario mínimo.

De hecho, su última aparición pública fue el pasado diciembre en las negociaciones por el salario mínimo para el 2021. Si bien estas negociaciones fueron virtuales por efectos de las restricciones de la pandemia, para ese momento Gómez ya era positivo por el mortal virus.

A Julio Roberto también se le vio impulsando el comité del paro nacional en 2019, pero fiel a su posición de tender puentes buscó canales de comunicación con el Gobierno de Iván Duque.

En el plano internacional, Julio Roberto Gómez se desempeñó durante años como representante de la Confederación en cargos como la presidencia de la Central Latinoamericana y del Caribe de Trabajadores (2004), así como presidente adjunto de la Confederación Sindical de Trabajadores de las Américas (2008) y durante largo tiempo fue uno de los miembros del Consejo de Administración de la Organización Internacional del Trabajo con sede en Suiza (2011).

Aspecto político

El Polo Democrático fue la tolda política con la que Gómez se adentró más al acontecer del país. Su llegada a este partido político de izquierda estuvo vinculada con Gustavo Petro, a quien el sindicalista respaldó en las elecciones del 2010, aunque luego se distanciaría en segunda vuelta.

En esos comicios Juan Manuel Santos sería el vencedor, acontecimiento con que llevaría a Gómez a romper con el Polo para fundar el movimiento Centro Independiente, con el que apoyó la candidatura de Petro a la Alcaldía de Bogotá.