'Hay futuro si hay paz', fue el mensaje que la Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad, la Convivencia y la No Repetición le compartió al país desde la ciudad de Barranquilla en un evento para celebrar sus tres años de funcionamiento.
Durante el encuentro el padre Francisco De Roux, presidente de la Comisión de la Verdad, comentó que el principal legado que se le puede dejar al país es la consolidación de una 'paz grande', en donde quepan todos los actores políticos y sociales. Además realizó una petición al Gobierno colombiano y a la guerrilla del Eln para que tiendan puentes para buscar una real negociación.
'Pedimos al Eln y a los grupos que se reclaman como insurgencias políticas y pedimos al Estado que se pase cuanto antes a la negociación. La guerra en Colombia no arregló nada, la guerra dañó todo lo que tocó', dijo Francisco De Roux.
Señaló que el país necesita renovar la convocatoria hacia esa paz grande 'por encima de todos los intereses políticos de partidos'.
Una paz 'grande'
En sus declaraciones, De Roux expresó que durante estos años, la Comisión ha estado en los lugares del territorio nacional donde 'las madres hablan de sus hijos desaparecidos, de sus esposos secuestrados, de los que fueron asesinados por hombres del Ejército en los 'falsos positivos’, de los pueblos destrozados por las bombas, de los soldados y exguerrilleros sin piernas, de los niños volados por minas antipersona y de millones de desplazados por décadas y, sobre todo, de los tiempos de la brutalidad de los años de la guerra salvaje, entre 1995 y el 2009, cuando la acumulación de conflictos nunca resueltos pasó por encima de la Constitución de 1991 y estalló en una confrontación a muerte', indicó.