Buscamos limpiar el nombre de nuestros familiares'. Esa es la voluntad a la que varias personas, en los últimos años, se han aferrado en busca de justicia para sus seres queridos; en concreto, para 127 personas que entre el 9 de enero de 2002 y el 9 de julio de 2005 fueron asesinadas en el norte de Cesar y en el sur de La Guajira, mediante la modalidad de los ‘falsos positivos’.
Los principales perpetradores de estos crímenes habrían sido 15 miembros del Ejército, específicamente, integrantes del Batallón de Artillería No. 2 La Popa, de Valledupar. 12 de estos militares asistirán este 18 y 19 de julio a la audiencia de reconocimiento de verdad, luego de que fueran imputados por crímenes de guerra y lesa humanidad por asesinato y desaparición forzada.
Laura Piña Díaz es una de esas víctimas que desea 'limpiar' el nombre de su padre, Álvaro Piña Londoño, un taxista y pintor automotriz de Barranquilla, quien 'fue engañado por varios militares' y llevado a Valledupar el 1 de marzo de 2005.