Mirian Martínez Gamero entró al escenario de combate ‘Sugar Baby Rojas’ con la única seguridad de que no le otorgaría el perdón al máximo responsable de la muerte de uno de sus hermanos. '¡No habrá perdón para usted!', dijo la mujer entre lágrimas.
Ella llegó al recinto en Barranquilla luciendo una camisa con el estampado de una fotografía de Pedro Antonio Ramírez Gamero, un hermano que el 28 de abril de 2002, en vísperas de su cumpleaños, fue reportado como desaparecido junto a su esposa y un amigo en Pedraza, Magdalena. 'Nunca más supimos de él y de ninguna de las otras dos personas. Ha sido un dolor que jamás superaremos'.
La familia Martínez Gamero aseguró que los restos del hombre fueron hallados el año pasado en San Onofre, Sucre. 'Solo supimos, con el tiempo, que allá los asesinaron, es por eso que yo no perdono a Salvatore Mancuso, el hombre que ordenó la muerte de mi hermano'.
Junto a Martínez, otras 450 víctimas asistieron este viernes al acto de reconocimiento de responsabilidades donde el exjefe paramilitar, junto a Édgar Ignacio Fierro Flórez y José Gregorio Mangones Lugo, pidieron perdón por sus crímenes, pero que muchas de las víctimas rechazaron. Martínez aseguró 'que estas acciones no logran resarcir el dolor que por años han sufrido'.