En el tercer día de la audiencia de Salvatore Mancuso ante la JEP, el exjefe paramilitar contó cuáles habían sido los crímenes ordenados por Carlos Castaño, máximo jefe de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) por petición de altos mandos militares.
'Después del homicidio, del asesinato de Jaime Garzón que fue una petición directa a Carlos (Castaño) de altos mandos militares (...) el señor Gustavo Gallón no fue asesinado por las AUC porque Carlos Castaño vio las graves implicaciones', dijo el exjefe paramilitar ante la JEP.
'Al doctor Gustavo Gallón quisiera expresarle de manera personal mi pedido de perdón y explicarle la situación de manera más profunda. Aprovechando su cargo, ojalá se pudiera tener en cuenta a las víctimas que tuvieron que salir del país en un éxodo masivo', expresó Mancuso
Asimismo, señaló que distintos periodistas de la época estaban en la mira por hacer denuncias sobre las AUC y la fuerza pública. Uno de ellos era Jaime Renginfo Ravelo, quien trabajaba en Maicao (La Guajira) y fue asesinado por denunciar frecuentemente la alianza entre las AUC y la Fuerza Pública.
'El señor Gustavo Rafael Ruiz Cantillo, quien era un periodista de la emisora de la emisora Radio Galeón de Santa Marta fue amenazado de muerte por las Autodefensas por las denuncias por los vínculos con la Fuerza Pública. Fue básicamente el mismo factor común denominador', contó Mancuso.
Sobre la información exclusiva que obtenía el grupo armado sobre el movimiento de los periodistas, el exjefe paramilitar sostuvo que era José Miguel Narváez, el entonces director de inteligencia del DAS, quien proporcionaba todos los datos necesarios.