Este sábado a las afueras del Hospital Militar de Bogotá, el abuelo de Lesly, Soleiny, Tien Noriel y Cristin, dio declaraciones a los medios y explicó que los menores están siendo bien atendidos.
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De igual forma, informó que sus nietos le habían contado que durante los días que estuvieron internados en la selva sobrevivieron a punta de agua de lluvias que tomaban de las hojas de los árboles, ramas y pepas que ingirieron para calmar el hambre.
Luego de recibir la noticia del rescate de sus nietos y su posterior traslado hasta la ciudad de Bogotá donde los niños son valorados por los especialistas, Narciso viajó hasta la capital para ver a los infantes tras más de un mes desaparecidos en la espesa selva entre límites del departamento del Caquetá y Guaviare.
'Acabo de mirar a los nietos. Tienen vida pero están muy acabaditos. Sé que están en buenas manos, que está el hospital. Yo sé que esto va a salir bien y vamos a seguir viniendo todo el tiempo, aquí yo voy a estar porque esto es un proceso que toca seguir', aseguró el hombre a su salida del centro médico militar.
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Respecto a la salud de Lesly, Soleiny, Tien Noriel y Cristin se mostró optimista de que pronto se recuperaran y que los niños no escondieron su felicidad cuando vio a sus familiares. 'Por el momento hay que dejarlos quieticos (…) Ellos están contentos al vernos a nosotros, la familia. Día tras día pueden ir cambiando las cosas a mejor', señaló.
Narciso no se refirió en profundidad a cómo sobrevivieron los cuatro niños los 40 días en medio de la selva, pero sí indicó que comieron algunas frutas que se encontraban mientras caminaban, tal como las Fuerzas Militares lo habían sostenido al encontrar restos frescos de maracuyá en medio de las labores de rescate.
'Cuando se accidentó el avión sacaron una fariña y con eso ellos sobrevivían, después que se le acabó la fariña empezaron a comer pepa'.
