El ansiado cese el fuego bilateral entre el Gobierno colombiano y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) arrancó a las cero horas de este jueves con gran expectativa y esperanza en el país, ya que se trata del más largo pactado con la guerrilla, con una duración de 180 días, y será verificado por la ONU.
'A partir de las 00.00 horas del día de hoy, 3 de agosto de 2023, entró en vigor el Cese Bilateral, Nacional y Temporal entre el Estado colombiano y el Ejército de Liberación Nacional. El Gobierno del presidente Gustavo Petro protege la vida de todos los colombianos', confirmó este jueves en sus redes sociales la Oficina del Alto Comisionado para la Paz.
Desde que se firmó el acuerdo, el pasado 9 de junio en La Habana, hasta la fecha ha habido muchas especulaciones y polémicas sobre cómo funcionará esta medida destinada a reducir el conflicto y crear condiciones para avanzar hacia un acuerdo de paz.
Por el momento no hay una lista de acciones concretas permitidas o prohibidas, sino que ambas partes se comprometen a 'no realizar acciones prohibidas en el Derecho Internacional Humanitario (DIH)', el reglamento internacional que fija las reglas de la guerra.
El presidente Gustavo Petro arribó este jueves a Corferias, donde se desarrolla la instalación del Comité de Participación. Los miembros negociadores de ambas delegaciones también dijeron presente.
De acuerdo con el Gobierno, miembros del ELN podrán moverse por todo el país, pero 'no pueden ocupar nuevos espacios, no podrán hacer presencia en cascos urbanos, vías principales o terciarias; tampoco existen zonas vedadas para el actuar de la Fuerzas Militares'.
Indicaciones a Fuerzas Militares
Hernán Giraldo, comandante de las Fuerzas Militares, impartió 17 órdenes de cara al cese al fuego.
De acuerdo con el oficial, las Fuerzas Militares continuarán con el desarrollo de operaciones militares en todo el territorio nacional, pero no podrán desarrollar operaciones ofensivas contra integrantes del ELN.
Sin embargo, 'en ningún caso se limitará el derecho a la legítima defensa propia y de terceros y el actuar ante un delito cometido en flagrancia, conforme la normatividad y reglas de enfrentamiento y del uso de la fuerza vigentes. Como consecuencia de lo anterior, se reitera que las Fuerzas Militares actuarán en una situación de flagrancia, de violación de DDHH e infracción al DIH'.
En este sentido, cuando se presenten acciones o situaciones con el ELN que vulneren los derechos y libertades de la población civil, se debe informar inmediatamente al escalón superior e interponer las denuncias ante la autoridad competente según corresponda.
Renglón seguido, Giraldo ordenó que se continúe con las operaciones militares, terrestres, fluviales, marítimas y aéreas contra el narcotráfico, la minería ilegal, la extracción ilegal de recursos naturales, el secuestro, la extorsión, reclutamiento de menores, contrabando, tráfico y porte ilegal de armas y demás conductas punibles contempladas en el código penal colombiano.