La tranquila localidad de San Calixto, ubicada en la región del Catatumbo, vivió una noche de caos y destrucción el pasado martes 31 de octubre. La alcaldía municipal se convirtió en un símbolo de la violencia que se desató tras las elecciones regionales del domingo 29 de octubre, cuando un grupo de personas no solo incendió la Alcaldía, sino que también arremetió en contra de la registraduría, la personería y la casa cultural.