Decenas de miles de personas aclamaron el martes al papa Francisco en la misa de inicio de su pontificado, que definió como una tarea de servicio especialmente dirigido a los más pobres y débiles.
El papa fue investido con el palio de lana de cinco cruces rojas y recibió el anillo del pescador, símbolo del papado como "pescador" de almas en referencia al apóstol Pedro.
Con estos dos gestos cargados de simbolismo, Francisco comenzó oficialmente su ministerio como pontífice de la Iglesia católica, una religión que profesan 1.200 millones de personas en el mundo.
ROMA, AP