La votación marcó una nueva derrota para el presidente Gustavo Petro, que ya le había cerrado la puerta a la consulta popular en mayo.
Desde la Casa de Nariño, el Gobierno había respaldado la candidatura de María Cristina Balanta, quien no logró imponerse en la plenaria del Senado.
La candidata a magistrada de la Corte Constitucional aseguró que si el petrismo la apoya no puede “repeler” para que no voten por ella. “Mi autonomía, mi autoridad y mi independencia no están en juego”, afirmó.
José Antonio Ocampo advirtió que “no tiene ningún sentido proponer una reforma sin proponer un recorte de gastos”.