El acueducto regional para solucionar la carencia de agua potable en nueve municipios de La Guajira, es el principal reto que se planteó el nuevo gobernador, José María Ballesteros, quien se posesionó ayer en Riohacha.
Ballesteros manifestó que va a gobernar 'con todos los sectores (...), para todos los guajiros', dijo al tiempo que se negó a dar los nombres de su gabinete. Recordó que aún está en vigencia la Ley de Garantías Electorales y que no es posible despedir ni contratar funcionarios públicos.
Informó que otro de sus retos es disminuir al máximo los índices de mortalidad infantil por desnutrición y la muerte de las materna. El nuevo gobernador indicó que es momento de exigirle a las EPS que cumplan con sus obligaciones para 'frenar los graves problemas del departamento en materia de salud'.
En el acto de posesión intervino el presidente de la Asamblea Ildefonso Medina, quien pidió a los medios de comunicación que no se continuara estigmatizando al departamento 'como ha sucedido a partir de la detención del exgobernador ‘Kiko’ Gómez, para quien pidió respeto, indicando que no es una persona a la que se le hayan comprobado todos los cargos que se le imputan. FDLH
