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A diferencia de lo que ocurrió en 1982 con el liberal Alfonso López, quien derrotado por el expresidente conservador Belisario Betancur, se preguntó desconcertado: '¿Qué pasó en la Costa?', el presidente Juan Manuel Santos podrá decir con honores que gracias a la diferencia que le sacó a Óscar Iván Zuluaga en la zona norte del país, su aspiración reeleccionista no se desvaneció.

Tal y como en aquella época, el domingo la expectativa por el comportamiento electoral de los costeños también era grande. Por un lado estaba la meta que se plantearon los barones electorales –esos mismos que han sido acusados de ser beneficiarios de la famosa ‘mermelada’– de duplicar la votación de Santos, es decir pasar de 951.833 votos a 1.903.666; y por el otro lado estaban las denuncias que ocho días atrás hizo el expresidente Álvaro Uribe de una supuesta compra masiva de votos por un valor de $30 mil millones.

Los resultados indican que, efectivamente, los caciques políticos de la región cumplieron con su objetivo. A diferencia del pasado 25 de mayo, cuando la votación a favor de Santos fue muy inferior a lo que obtuvo la Unidad Nacional en los departamentos costeños durante las elecciones legislativas, esta vez no solo duplicaron la votación del presidente sino que la aumentaron a 2.011.409 –107.743 votos más de lo presupuestado–.

En cuanto a las denuncias de fraude, estas tampoco hicieron falta. Desde muy temprano, representantes del uribismo en el Atlántico denunciaron una presunta compra de votos en Sabanalarga y Santo Tomás, además de supuestos formularios E-14 marcados en Ponedera desde antes de cerrar las urnas. En córdoba también se presentaron quejas.

Sin embargo, no se conocieron pruebas y las autoridades no hicieron un pronunciamiento oficial ni confirmaron la veracidad de las denuncias.

Caciques políticos se defienden. EL HERALDO consultó a los principales líderes políticos de la Región Caribe sobre los resultados de los comicios presidenciales y el significativo aumento de la votación de Santos en tan solo dos semanas y sobre las denuncias hechas el mismo domingo por el Centro Democrático y sus voceros.

Al respecto, el representante a la Cámara de La Guajira Alfredo Deluque calificó las quejas de Uribe como 'pataletas de ahogado' y lamentó que 'no haya tenido la fortaleza suficiente para reconocer la derrota'.

Por su parte, el senador Jorge Ballesteros aseguró que serán las autoridades competentes las que decidan si investigan las denuncias o no. 'Lo que vimos en La Guajira fue un debate transparente, sin reclamaciones y con unos resultados esperados', dijo.

Antonio Guerra, senador sucreño de Cambio Radical, dijo que con 'la reelección del presidente ganó la democracia. Se votó por un mandato claro por la paz, por la continuación de los diálogos de paz y por la consolidación e iniciación de la negociación con el ELN'.

A su turno, el senador liberal Mario Fernández expresó estar complacido porque con la reelección de Santos 'ganó el país, la paz y por ende sigue vivo el anhelo de terminar con 50 años de conflicto'.

El representante Yahir Acuña reconoció que en la primera vuelta la clase política 'se relajó'. 'Sabíamos que íbamos a ganar porque trabajamos para eso. En la primera tal vez un sector de la clase política se relajó creyendo que el candidato-presidente iba a poder sacar solo este proceso, pero al final todos nos pusimos la camiseta', sostuvo.

El senador electo José Alfredo Gnecco señaló que 'es lamentable que el expresidente Uribe se refiera al triunfo y al apoyo de la Costa de esa forma, nosotros hicimos la política como se ha hecho siempre, con ideas, no hemos comprado votos'.

Sobre las denuncias del Centro Democrático, Bernardo ‘Ñoño’ Elías sostuvo que 'deberán las autoridades y los organismos de control aplicar los mecanismos investigativos para establecer quién hizo el fraude y cómo'.

'Lo que pude ver es que fueron unas elecciones normales, transparentes y de alta participación. Por consiguiente si hay alguna irregularidad que se denuncie', puntualizó.

Andrés García Zuccardi, por su parte, dijo que el apoyo a Santos fue masivo por la esperanza de tener un país en paz y que la votación no obedeció al funcionamiento de maquinarias políticas.

'Cientos de miles de personas en departamentos como Bolívar trabajaron por multiplicar la confianza y la esperanza de tener un país en paz, esto fue con el voto que depositaron en favor del presidente Santos', manifestó.

Mauricio Gómez, representante electo por el Atlántico, rechazó las acusaciones y expresó que 'las garantías estuvieron dadas para los dos partidos y las ventaja fue muy amplia'. Además, afirmó que 'históricamente la Costa ha votado por Santos' y que si hubo alguna irregularidad, 'las autoridades tendrán que decidir'.

Finalmente, José David Name afirmó que el Caribe, en especial Barranquilla y el Atlántico, 'se movilizó como esperábamos y como siempre creímos que lo iba a hacer. Esperamos que esto se traduzca en beneficios para la región'.