Otro ángulo... Cada sábado, los lectores tendrán la oportunidad de conocer en este espacio otro aspecto de los aspirantes a la Alcaldía de Barranquilla y a la Gobernación del Atlántico, que seguramente la ciudadanía desconoce, como aficiones, preferencias, amigos, anécdotas o rasgos de su personalidad, entre otros.
Candidatos a la Alcaldía
Alejandro Char - Cambio Radical
En vacaciones, el entonces estudiante del Colegio Liceo Cervantes Alejandro Char ayudaba a su padre con su negocio. 'Me dedicaba a sacar cuentas con mi papá en sus inicios de construir empresas', recuerda.
La colaboración con su padre y la subsiguiente agilidad con los números influyó mucho en su desempeño escolar, pues cuenta que si bien en historia no se desempeñaba muy bien, sí sobresalía considerablemente en las matemáticas. 'En las matemáticas me iba muy, pero muy bien', dijo.
Si bien no fue uno de los mejores estudiantes de su promoción, afirma que 'siempre respondía y ganaba el período lectivo o ganaba el año, como se decía antes, sin ningún problema'. Además, se destacaba en la práctica del deporte. 'Por ese aspecto me gané la admiración y el respeto de todos mis compañeros; el colegio es la etapa en la que se empiezan a forjar las verdaderas amistades que luego se van fortaleciendo con el tiempo', dijo.
Rafael Sánchez - Independiente
Reunidos en el Instituto Educativo Distrital Pestalozzi, un grupo de exalumnos recuerda cómo jocosamente hace más de 30 años se reía, apodaba y remedaba a sus profesores. Entre esos estudiantes estaba Rafael Sánchez Anillo, que afirma que aquellos con los que rió en los setenta son sus 'amigos de toda la vida'.
Desde sus inicios, Rafael fue uno de los mejores estudiantes, reconocido por ser muy bueno en matemáticas, afición que estudiaría algunos años después en la universidad.
'Era muy bueno en matemáticas y física, tenía dificultades en química, pero nunca la perdí ni la habilité, solo me esforzaba mucho en esa materia'.
Recuerda además cómo la Pedagogía crítica, propia en su formación, es lo que sigue poniendo en práctica para la transformación social. Además de seguir en contacto con sus compañeros, Rafael Sánchez Anillo cuenta: 'mis antiguos profesores son mis mejores amigos'.
Candidatos a la Gobernación
Juanchito Acuña - Independiente
Juanchito Acuña abrió los brazos y separó a dos de sus compañeros que estaban peleando, en un intento por abrir el diálogo. 'Intercambié algunas palabras con los compañeros, y de repente la seño apareció detrás de mí y pensó que yo había empezado el incidente', recuerda. 'Así, pues, yo recibí el regaño'.
Este candidato vivió en su infancia entre Cascajal y Cartagena. En esta última estudió en el Colegio Fernando La Vega, de donde es graduado.
Años más tarde se graduó como médico, pero ya años antes, durante su época escolar, el candidato mostraba habilidades académicas y vocación de servicio hacia otros, que se desarrolló tempranamente, fueron cruciales para su disciplina. 'Me iba bien en todo lo que tenía que ver con biología, anatomía, naturaleza, además era muy dedicado como estudiante, por lo que no me iba mal en nada', agrega.
Jaime Berdugo - Independiente
Sobre un pupitre, Jaime Berdugo, entonces estudiante de primaria, daba emocionado un discurso que le valió ser sancionado, recuerda su madre, Lesy Pérez. 'Fue un niño inquieto, cuando llegó al grado segundo se sabía las tablas de multiplicar, ese día la docente lo ató a la silla y le puso esparadrapo en la boca. Cuando llegó fueron los amigos los que me contaron' agrega.
Su mamá fue su profesora de infancia y la que, con historias de imágenes y rayas en cuadernos, lo motivó a ser un buen lector.
Berdugo afirma que la enseñanza que su madre le dio la fue fortaleciendo en todas las instituciones en las que estudió, como en la Institución Educativa Aspros, de donde se graduó ganando el premio Andres Bello por tener uno de los mejores resultados del Icfes en el Departamento.
Se desempeñó muy bien en matemáticas, biología y filosofía; sin embargo 'no tenía muchas aptitudes para el arte' asegura.
Manuel Díaz - Centro Democrático
Cuando se escuchó el sonido propio de un vidrio rompiéndose en el salón de clase, ninguno de los alumnos del Liceo Cervantes respondió a la pregunta de quién había sido el causante del daño. El castigo fue para todos, incluso para el entonces estudiante Manuel Díaz: ir el sábado y el domingo al colegio y estar de pie en el patio todo el día.
'Matemáticas y español fueron las materias en las que mejor me desempeñé; en ciencias y biología no mucho', afirmó.
No obstante, su familia sostiene que fue un estudiante sobresaliente y además un deportista apasionado, pues incluso llegaron a los oídos de su padre propuestas para jugar profesionalmente al fútbol, recuerda su hermana Carmen Díaz.
Sus amigos han sido centrales en su vida, y aquellos con los que jugó y con los que lo castigaron ese día por no delatar a quien rompió un vidrio, ahora son casi sus hermanos, cuenta su padre.
Juan García - Independiente
Juan García ganó una beca del Icetex por su rendimiento académico en la primaria y pasó a estudiar al instituto Agrícola de San Jacinto, Bolívar, donde se graduó como técnico en el bachillerato. De su época de estudiante recuerda el día en que uno de sus profesores fue golpeado con una pepa, cuando en un momento de desorden general en su salón de clase se creó una 'guerra de mamones y guayabas secas'. Los aprendizajes de su casa fueron complementados en la escuela donde fortaleció su liderazgo e, incluso, fue presidente del comité de deportes durante casi 5 años. Responsabilidad, solidaridad y disciplina, recuerda, fueron los bastiones de su formación.
'En las matemáticas y en las ciencias agropecuarias me fue siempre bien, no tanto en religión', cuenta García jocosamente. 'La clase me la daba un párroco muy conservador y siempre fui inquieto' agregó entre sonrisas.
Alfredo Varela - Alianza Verde y Partido de La U
Alfredo Varela sentía que sus piernas le temblaban al estar en la misma posición castigado. 'Había un profesor que nos dejaba de pie en frente de toda la clase cuando se portaba uno mal', comenta el hoy aspirante a la Gobernación, 'y obviamente a uno se le cansaban las piernas, aunque en esa época todo causaba risa', agrega.
Varela se destacó por ser un estudiante sobresaliente, muy bueno en los números, según recuerda. A su vez, rescata un aspecto muy importante de su formación: la disciplina que le inculcaron en el Colegio Sagrado Corazón de Jesús, que ha marcado su trayectoria como político y que lo han hecho 'muy organizado, responsable y autoexigente', afirma.
Actualmente no ha dejado de relacionarse con sus compañeros de infancia, de hecho, con el uso de Whatsapp han creado un grupo en el cual se ponen al tanto de sus vidas, lo apoyan en su campaña política, y recuerdan anécdotas.
Eduardo Verano - Liberal
Los sábados y domingos algunos estudiantes del Colegio Biffi La Salle se quedaban para aprender poesías como castigo por travesuras cometidas. Eduardo Verano fue en algunas ocasiones uno de ellos. 'Había un sistema de control de disciplina donde había bonos y, al cometer faltas, los quitaban. Al no tener ninguno el fin de semana teníamos que quedarnos aprendiéndose poesías larguísimas', recuerda sonreído.
Verano cuenta que los días de colegio le traen buenos recuerdos y afirma que lo llenaron de experiencias que ahora disfruta participando en la política. 'Me encantan las correrías de la política, porque me permite ir a las tiendas de barrio y pueblo donde están todos los sabores de nuestra infancia'. Además recuerda que se desempeñó muy bien en matemáticas, física e historia, pero no tan bien en química.