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La Comisión Primera del Senado aprobó ayer en primer debate el proyecto de Acto Legislativo para la Paz, que contiene una serie de instrumentos para implementar con agilidad los eventuales acuerdos de paz suscritos con las Farc en La Habana.

En medio de una acalorada sesión de más de siete horas, la célula congresional que se ocupa de los asuntos constitucionales avaló la iniciativa que crea una Comisión Legislativa Especial con un procedimiento expedito para la aprobación de los proyectos en torno a la paz y que le otorga unas facultades extraordinarias al presidente durante 90 días prorrogables para expedir decretos con fuerza de ley alrededor de lo pactado en la mesa de diálogos.

Al respecto, el senador barranquillero de La U, Armando Benedetti, ponente, aclaró que 'lo que hemos aprobado son los instrumentos que le dan facultades al presidente para que implemente un proceso de paz, luego de la firma de la paz, de la refrendación popular de los acuerdos, de la dejación de armas y de un control previo'.

Y agregó que se aprobó, así mismo, 'una comisión legislativa que va a acortar los plazos porque la paz ya viene y estamos atrasados en la implementación'.

La discusión del proyecto de reforma constitucional, que pasará ahora a la plenaria del Senado al segundo de ocho debates, no estuvo exenta de polémicas, protagonizadas por los cuatro senadores del Centro Democrático y uno del Polo, que se ausentaron del debate luego de que no se aprobaran sus proposiciones de archivar y aplazar el trámite de la iniciativa, respectivamente,

Lo que encendió los ánimos fueron las palabras del coordinador ponente, Roy Barreras, de La U, quien dijo: 'hasta hoy tuve la esperanza de ganar al Centro Democrático a favor de la paz. Pero después de oír al senador Alfredo Rangel negando la vida y la paz como derechos fundamentales, creo que nada les servirá'.

Pronunciado lo anterior, prosiguió: 'estamos frente a los nuevos terroristas en Colombia'.

En respuesta, el senador barranquillero del Centro Democrático, Jaime Amín, calificó el hecho como 'un despropósito que un senador muy conspicuo de la Unidad Nacional no tuviera empachos en decirnos públicamente que los senadores del Centro Democrático éramos los nuevos terroristas de Colombia, lo que es supremamente grave, no solamente por la amenaza a la democracia que representa este proceso de paz y aparte de la ignominiosa persecución de la justicia contra el uribismo'.

Y concluyó: 'qué dolor y qué tristeza, haciendo de corifeos, dándonos un trato injustificable con el remoquete de terroristas'.

Al inicio de la sesión, el senador Alfredo Rangel, del Centro Democrático, había presentado una ponencia negativa al proyecto, al que calificó como 'un golpe de Estado contra el pueblo colombiano y contra la democracia' y 'un atentado contra la separación de poderes'.

Advirtió el parlamentario uribista, quien planteó el archivo de la reforma constitucional, que el Acto 'crea una instancia nueva y unos procedimientos para aprobar leyes y reformas a la Constitución Nacional que estimamos totalmente inconstitucionales'.

Así mismo, criticó que el Congreso, de aprobarse la iniciativa, 'pierde autonomía y entrega su capacidad legislativa al Ejecutivo'.

Dijo además Rangel que los procedimientos planteados 'acaban en la práctica con el bicameralismo y establecen de hecho el unicameralismo', ya que 'los proyectos serán estudiados primero en la Comisión Legislativa Especial, conformada por parlamentarios de ambas Cámaras, y luego en sesiones conjuntas de Senado y Cámara'.

Finalmente, señaló que el hecho de que la reforma constitucional le otorgue al Ejecutivo la facultad de expedir leyes mediante la figura de decretos ley durante tres meses prorrogables por otros tres, 'vista la numerosa variedad de temas que podrían ser objeto de esta manera antidemocrática de legislar, se estaría revistiendo al Ejecutivo de potestades que en una democracia solamente tiene el órgano del poder público que el pueblo en su designio soberano ha empoderado para tal efecto'.

Por su parte, el senador del Polo Democrático, Alexánder López, advirtió que la bancada de izquierda no ve con buenos ojos el hecho de que 'este proyecto no haga parte de los acuerdos de La Habana definidos hasta la fecha', lo que podría representar 'una talanquera al proceso de paz'.

Y antes de anunciar que las toldas amarillas se retirarían del debate de ser negada su proposición de aplazamiento del mismo, indicó que 'las facultades al presidente deben quedar debidamente selladas en este proyecto para que luego, en otro tema, por ejemplo, por la crisis económica, no se nos impongan reformas absolutamente negativas'.

Barreras, a su turno, aclaró que que las facultades presidenciales estarán limitadas a los acuerdos adelantados en Cuba, y negó que se tratara de una ley habilitante para legislar sobre diversos temas. Así mismo, aseguró que esas facultades no podrán ser usadas para expedir actos legislativos o leyes estatutarias u orgánicas, y que el Gobierno deberá rendir informes del cumplimiento y desarrollo de esas facultades cada 30 días.

Igualmente, explicó que en la Comisión Legislativa Especial, compuesta por los miembros de las comisiones primeras de Senado y Cámara, y por otros 12 parlamentarios, entre los que se respetará la cuota de género, se realizarán sesiones conjuntas de las células legislativas constitucionales pero las votaciones tanto de Cámara como Senado se harán por separado, respetando el bicameralismo.

Santos dice acuerdo de justicia se revelará cuando este listo

El presidente Juan Manuel Santos manifestó ayer que el acuerdo sobre justicia transicional firmado el pasado 23 de septiembre en La Habana será revelado en su totalidad una vez esté absolutamente concluido, tal y como ha ocurrido con los demás puntos acordados con las Farc.

'Ese acuerdo va a ser publicado, tengan la seguridad, y muy pronto, apenas terminemos esos poquitos puntos de los 75 que todavía necesitan alguna precisión', afirmó Santos, al intervenir en el Tercer Foro Urbano Nacional ‘Ciudades y lecciones: Una agenda para el posconflicto’.

'Parte del éxito en el proceso de paz es que hemos obrado con disciplina, rigor y responsabilidad y no romperemos esas reglas', añadió.

El jefe de Estado se refirió al tema de las víctimas incluido en la agenda que rige el proceso de paz, y que está relacionado con aspectos como justicia, verdad, reparación y no repetición.

'No hemos terminado el punto, hay todavía algunos vacíos, entonces yo no me voy a dejar presionar de algunos medios de comunicación, o de las propias Farc, o de los opositores del proceso, para publicar algo que no está totalmente terminado, porque sería una falta de responsabilidad', afirmó.

Según el presidente, 'cualquier vacío, cualquier interpretación dudosa, lo que genera son más problemas'.

Recordó que los acuerdos alcanzados sobre los tres primeros puntos de la agenda (tierra, participación política y drogas y narcotráfico) que las partes discuten en La Habana fueron publicados una vez estuvieron concluidos.