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La Corte Constitucional aplazó nuevamente la votación sobre el matrimonio igualitario que estaba programada para llevarse a cabo en la Sala Plena de este jueves. Este es el segundo aplazamiento de la votación en los últimos tres meses, que ahora quedó fijada para la próxima semana.

La decisión fue tomada por motivos de 'agotamiento de agenda' ya que el alto tribunal se concentró en la escogencia de su mesa directiva, ratificando la magistrada María Victoria Calle como presidenta y al magistrado Luis Guillermo Guerrero como vicepresidente.

La discusión sobre matrimonio igualitario se reabrió en la Corte Constitucional gracias a una serie de tutelas interpuestas por varias parejas LGBTI pidiéndole a la Corte reconocerles su derecho a contraer matrimonio.

Esta discusión viene con ponencia negativa del magistrado Jorge Pretelt bajo el argumento de que el Congreso es el único que tiene las facultades para avalar el matrimonio entre parejas del mismo sexo.

Sin embargo, por lo menos seis de los magistrados de la Constitucional votarán negativamente esta ponencia y a favor del matrimonio igualitario, los mismos que votaron positivamente el histórico proyecto que permitió la adopción de niños por parte de las parejas del mismo sexo.

María Victoria Calle, Gloria Stella Ortiz, Jorge Iván palacio, Luis Ernesto Vargas, Alberto Rojas Ríos y el recién nombrado Alejandro Linares, serían los magistrados que votarían en contra de la ponencia de Pretelt, mientras que Luis Guillermo Guerrero y Gabriel Eduardo Mendoza la respaldarían.

Para Wilson Castañeda, director de la Corporación Caribe Afirmativo, este nuevo aplazamiento es desafortunado porque la decisión de la Corte es requerida 'de forma urgente' ya que bajo las normas actuales hay un 'vacío legal' que perjudica a las parejas del mismo sexo.

Castañeda recordó que desde 2011 la Corte Constitucional reconoció a las parejas del mismo sexo como familia y entregó un mandado al Congreso para que legislara sobre el matrimonio igualitario dentro de un plazo de dos años, que al vencerse en 2013 habilitaba de inmediato el matrimonio igualitario para proteger a las familias.

'Este vacío legal, hizo que algunos jueces y notarios accedieran a casar a parejas del mismo sexo en el país amparados en la solicitud de la Corte, ha la fecha son un poco más de 40 en todo el país', señala Castañeda.

Castañeda teme que estas dilación en el fallo terminen perpetuando el 'limbo' en el que están muchas parejas que no saben si pueden en efecto contraer matrimonio o las que ya lo hicieron 'ven cómo se les desconoce su legitimo contrato por ejemplo, en los espacios laborales'.