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El senador del Centro Democrático, Álvaro Uribe, llegó a impulsar la recolección de firmas en cumplimiento de la denominada 'resistencia civil' contra el plebiscito que debe avalar el proceso de paz que en Cuba negocian el Gobierno Nacional y las Farc.

'Aquí estamos con los ciudadanos de Valledupar, acompañando con sus firmas esta protesta; buscando la paz que Colombia necesita, no la paz de Santos', declaró a los periodistas.

Al recorrer las calles de sectores como Cinco Esquinas y La Nevada y en concentraciones en la Biblioteca Departamental y el Parque de las Madres, el expresidente y líder de la oposición compartió con quienes se acercaron a apoyar la ‘firmatón’.

En cada uno de estos lugares Uribe insistió en que Santos 'en lugar de disuadir a los criminales, lo que ha hecho es intimidar a la sociedad; en lugar de ilusionar a la comunidad colombiana, Santos lo que hace es envalentonar a los criminales' y dijo que 'el presidente, la semana pasada, amenazó con terrorismo urbano y ayer con impuestos, que ya están bastante altos. Esto me parece muy grave'.

Sobre el anuncio de un posible cese bilateral el fuego a partir del 20 de julio, fue enfático en que la suspensión unilateral de las hostilidades que anunciaron las Farc el año anterior 'sirvió para que (la guerrilla) aumentara extorsión, narcotráfico y capacidad criminal'.

El 'chantaje'

El Gobierno Nacional y las Farc se han 'puesto de acuerdo' para 'obligar a los colombianos' a aceptar lo que ellos acuerden en el proceso de paz de La Habana, afirmó ayer el procurador Alejandro Ordóñez, en nuevas y vehementes críticas, y sostuvo que lo que está sucediendo es un 'chantaje'.

Para el jefe del Ministerio Público tanto la administración del presidente Juan Manuel Santos como la guerrilla están usando dos instrumentos: el de la amenaza con la guerra terrorista y el miedo de una nueva cascada de impuestos, si no se aprueban los acuerdos.

'Ello es un chantaje', enfatizó y dijo que esta es 'una estrategia de guerra psicológica para lograr que los colombianos aprobemos lo acordado en La Habana'.