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Desde Rionegro, Antioquia, a la que llamó 'la cuna de la Constitución más liberal y garantista del siglo XIX', el presidente Juan Manuel Santos encabezó la conmemoración de los 25 años de la Constitución Política de 1991 'la más liberal y garantista del siglo pasado'.

Inició su discurso advirtiendo que estas dos cartas de navegación 'nos enseñan una ruta común' de democracia incluyente, respeto por la opinión del otro, libertad de prensa y de cultos, 'y el mayor esfuerzo posible para satisfacer las necesidades de todos los ciudadanos'.

La paz con el M-19

Consideró el primer mandatario esta fecha como 'una coincidencia afortunada' porque 'estamos poniendo punto final a una guerra interna de más de medio siglo entre el Estado y la guerrilla más grande y más antigua no solo de Colombia, sino del continente', refiriéndose a las Farc.

Recordó en este sentido que a la Constitución de 1991 'se le ha llamado un tratado de paz, y sin duda lo fue', ya que terminó de sellarse la paz con el M-19, y fue además la puerta por la que otros grupos armados, como el EPL, el PRT y el Quintín Lame, abandonaron también la ilegalidad.

Aseguró que la Constitución de 1991 ganó la batalla de la paz y que, ahora, 'estamos completando la tarea que nos fijamos hace 25 años'.

Explicó que la Carta Política es 'la artífice de esta victoria de la paz', porque se hizo para dar legitimidad a las instituciones, porque es suficientemente pluralista y tolerante, porque condujo a unas transformaciones sociales profundas -citando la ley de víctimas y de restitución de tierras, la ley estatutaria de salud, la ley contra la discriminación, la ley para las personas con discapacidad y la ley para las víctimas de violencia sexual-, por el avance de la democracia participativa y porque le dio legitimidad al monopolio del uso de las armas por parte del Estado.

Dijo, además, que '25 años después somos un país mejor, con instituciones más fuertes y a la vez más democráticas y eficaces, con posibilidad de avanzar hacia una paz estable y duradera, gracias al valiente y visionario esfuerzo que se dio hace un cuarto de siglo'.

La Constituyente

Reconoció Santos el liderazgo de los presidentes Virgilio Barco y César Gaviria, el entusiasmo de los jóvenes que impulsaron el mecanismo de la séptima papeleta, el trabajo de los constituyentes y la labor de la Corte Constitucional como guardiana e intérprete de la Carta Fundamental.

Se dirigió entonces a los togados de este alto tribunal para aplaudir 'la doble función que ustedes cumplen como organismo de cierre en la protección de los derechos constitucionales fundamentales y como tribunal decisor de los litigios de constitucionalidad'.

Frente al otro reconocido logro de la Constitución del 91, reportó que desde sus inicios se han interpuesto alrededor de 5 millones de tutelas y que actualmente se pueden presentar unas 40.000 al mes: 'podemos decir que unas 25 millones de personas han sido beneficiarias, la mitad de nuestra población', y criticó la práctica de la 'tutelitis', a la que definió como 'el mal uso de la tutela'.

La paz con las Farc

Trajo a colación el mandatario el acuerdo que se firmó el 23 de junio en La Habana, 'que nos debe llevar en breve término al Acuerdo Final para la Terminación del Conflicto y la Construcción de una Paz Estable y Duradera' con las Farc.

Al respecto señaló que 'es mejor un país en paz que un país en guerra, Parece una verdad de Perogrullo pero tenemos que enfatizarla porque todavía persisten quienes prefieren las soluciones de fuerza'.

Y garantizó a los colombianos que 'pueden tener la certeza de que cada punto de lo acordado en el proceso de paz ha tenido en cuenta el espíritu y la letra de nuestra Constitución'.

Recordó que está como cabeza del equipo negociador a uno de los artífices de la Carta, Humberto De La Calle, y entre los asesores para construir el andamiaje de la justicia transicional a los dos expresidentes de la Corte Constitucional, Manuel José Cepeda y Juan Carlos Henao.

Sin 'sugerir el sentido en que deben tomar las importantes decisiones', manifestó a los togados de la Corte Constitucional que 'el voto de confianza realizado por la mesa de negociaciones de La Habana es un signo de apreciación de su valor institucional, que engalana y estimula a la Corte', y celebró: 'qué bueno saber que estamos otra vez en la historia de Colombia en manos de las sabias decisiones que ustedes han tomado y habrán de tomar'.

Finalmente, reiteró que la Constitución de 1991 se hizo en uno de los momentos más difíciles de la historia del país y que fueron los jóvenes los que tuvieron la visión de entender la trascendencia del momento y promovieron el proceso que llevó a la Constitución de 1991: 'ahora también estamos superando momentos de adversidad, y queremos hacerlo nuevamente de la mano de los jóvenes, porque la paz que buscamos es precisamente para ellos, para las nuevas generaciones de ciudadanos'.

Y concluyó: 'hace un cuarto de siglo nació una Constitución para la paz; hoy estamos haciendo la paz dentro de la Constitución'.