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El ministro del Posconflicto, Rafael Pardo, y la ministra del Trabajo, Clara López, criticaron la medida de desalojo que implementó el alcalde mayor de Bogotá, Enrique Peñalosa, contra el campamento por la paz instalado hace 45 días en la Plaza de Bolívar de la capital.

'Muy mal que el campamento de paz de la plaza de Bolívar, pacifico, espontáneo y cívico, haya sido desalojado por fuerza. Esa no es La Paz', escribió Pardo en Twitter.

Por su parte López afirmó: 'Desalojo a la madruga con ESMAD de @CampamentoPaz, muestra falta de reconocimiento con el compromiso pacifista para dar paso a #SalsaAlParque'.

A pesar de que varias de las organizaciones sociales que hicieron parte del campamento firmaron y presentaron un documento el viernes en el que anunciaban su retiro por 'considerar que cumplió con su propósito', otras tantas decidieron mantenerse en el lugar hasta que el nuevo acuerdo fuera debidamente implementado.

De acuerdo con un comunicado emitido por la Alcaldía Mayor de Bogotá, el desalojo se dio en común acuerdo con las organizaciones, fue pacífico y no hubo heridos.

'La permanencia de carpas, vallas y todo tipo de elementos en un espacio público como este, en medio de eventos de aglomeraciones de alta complejidad, se convierte en un riesgo para la seguridad de todos', afirmó Peñalosa en el documento.

Sin embargo, los ciudadanos que se mantuvieron en sus carpas denunciaron abusos por parte del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) y desestimaron el acuerdo con la administración aduciendo que los sectores firmantes no representan la voluntad de todo el campamento.

El desalojo se terminó llevando a cabo a las 3 de la mañana del sábado y contó con la participación de 200 miembros de la policía, además de apoyo del Esmad.