Entre el lunes y el jueves de la próxima semana deberá estar constituida la Comisión de Implementación del nuevo Acuerdo Final para dar inicio formalmente a la etapa del posconflicto.
Así lo explicó el ministro consejero para el Posconflicto, Rafael Pardo, quien señaló que esta comisión será la encargada de hacerle seguimiento al desarrollo legislativo de los acuerdos y dirimir cualquier controversia que se pueda presentar entre las leyes y el texto pactado entre el Gobierno y las Farc.
Dicha comisión estará integrada por tres miembros del Gobierno y tres de las Farc y deberá empezar a operar tan pronto se dé la refrendación del acuerdo definitivo firmado el jueves en el Teatro Colón.
Pardo, en una interacción en vivo por redes sociales, explicó las tres líneas de acción prioritarias y principales retos para la primera fase del posconflicto, los cuales ya están empezando a desarrollarse .
En primer lugar, señaló el ministro consejero, está 'el desarrollo de proyectos productivos de carácter socioeconómico' en las zonas rurales más afectadas por la guerra, los cuales ya empezaron a implementarse en la estrategia de respuesta temprana del Gobierno que ha invertido durante el 2016 1.3 billones de pesos.
En este eje se encuentra la implementación de la reforma rural integral, los programas de desminado humanitario y de sustitución de cultivos, entre otros.
El segundo eje será la implementación del acuerdo posterior a su refrendación en el Congreso.
Aquí destacó Pardo las primeras normas que se deben tramitar en el legislativo, empezando con una reforma constitucional que instaure la Jurisdicción Especial de Paz y una ley que defina la transición jurídica de los miembros de las Farc a la justicia especial. Además, la ley de amnistía, la ley de tierras y ley sobre el catastro.
Para este punto la Comisión de Implementación ya debe estar operando y junto con ella se debe crear el Consejo Nacional de la Reincorporación.
Este último organismo, que estará integrado por dos miembros de las Farc y dos del Gobierno, será 'la instancia que va a estar encima de los programas que permitan una reincorporación a la vida civil y vida productiva (de los excombatientes de las Farc) y reduzca, si es posible a 0, la reincidencia'.
En tal sentido, destacó Pardo, 'el éxito de un proceso de paz tiene que ver con el paso de las armas a la política pero también que los que han estado alzados en armas puedan ingresar a la vida civil y tener una vida digna'.
Este constituiría entonces el tercer eje de acción.