Compartir:

La Misión de Observación Electoral (MOE) entregó este jueves un informe sobre el riesgo electoral en todo el territorio nacional de cara a las elecciones presidenciales y de Congreso que se realizarán este año, y concluyó que 170 municipios del país están en algún tipo riesgo (extremo, alto o medio), siendo la cifra más baja registrada desde que se empezó esta medición por la organización.

El informe también indica que a pesar de que el riesgo consolidado disminuyó en comparación con la jornada electoral del 2014, en la que se tenían 260 municipios, el nivel de riesgo extremo aumentó en 14 municipios, pasando de 50 en 2014, a 64 para los procesos electorales que se avecinan.

Además, se señala 65 de estas entidades territoriales están en riesgo alto y 41 en riesgo medio.

De acuerdo a Alejandra Barrios Cabrera, directora nacional de la MOE, 'los riesgos electorales pasaron de ser corredores que atravesaban importantes zonas del país a ser regiones específicas en las que se concentran economías ilegales y diferentes actores armados'.

También se indica que los factores indicativos de fraude, tanto para las elecciones de Cámara como para las de Senado, disminuyeron levemente con relación a hace cuatro años.

'Mientras que para las elecciones de 2014 la MOE señalaba 410 municipios en riesgo para Senado y 386 municipios en riesgo para el Cámara de Representantes, para 2018 la MOE alertó riesgos en 379 municipios para Senado y 355 en Cámara', indica el comunicado de prensa.

Disminución de la violencia en 79 municipios. Otro de los datos que entrega la MOE es una disminución en el dato de riesgo consolidado por factores de violencia.

'Para las elecciones de autoridades nacionales de 2014 se alertaban 389 municipios con riesgo y en 2015, 438 municipios; para las elecciones de Congreso y Presidente de 2018 la MOE alerta riesgos de violencia en 310 municipios, de los cuales 130 en riesgo medio, 122 en riesgo alto y 58 en riesgo extremo', indica el documento.

La organización atribuye esta disminución a los factores de violencia al proceso de paz y a la consecuente desmovilización de las Farc.