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Un adagio popular colombiano dice que la sangre tira, y en el caso de la política Germán Vargas Lleras sí que lo puede decir. Su abuelo materno fue quien se la motivó y la cultivó, el expresidente Carlos Lleras Restrepo (1966-1970), de ahí que incluso hoy en el subconsciente de miles de colombianos le identifican como Lleras y no como Vargas.

Germán Vargas Lleras también le debe su crecimiento en la política a otro mentor que incluso le acompañó hasta la muerte, a Luis Carlos Galán Sarmiento, quien fue asesinado la noche del 18 de agosto de 1989 en Soacha, Cundinamarca. En ese momento, Vargas, con 27 años de edad, ya había sido concejal en Bojacá y Bogotá.

De ese inicio, Germán Vargas cuenta con emoción que unos años antes, en la sala de redacción de la Revista Nueva Frontera -que dirigió su abuelo-, era el encargado de hacerle el resumen de la prensa nacional e internacional al expresidente liberal, lo cual empezó a darle un conocimiento del funcionamiento del Estado.

Y como su abuelo, Germán Vargas estuvo en el Partido Liberal, con el que fue concejal de Bogotá por dos periodos, tiempo que le ayudó a empezar a consolidar su imagen como uno de los nuevos líderes políticos de peso en la capital del país, carrera que finalmente lo llevó al Senado de la República para luego dejar el Partido Liberal para fundar Cambio Radical. Durante el gobierno de Andrés Pastrana (1998-2002), Vargas Lleras estuvo en la oposición, particularmente contra el tema de los diálogos de paz con las Farc, lo que le llevó a que en el 2002 fuera uno de los jefes políticos que ayudaron a Álvaro Uribe a llegar a la Presidencia de la República.

El recio estilo que identificó al expresidente Lleras fue el que empezó a consolidar Vargas. La primera década de este siglo le permitieron tener un crecimiento importante para que en 2009 se lanzara por primera vez a la Presidencia de la República, la cual perdió con el actual mandatario Juan Manuel Santos. Pero fue junto a él con quien tuvo su desarrollo en la administración pública. Vargas, en el primer gobierno, selló la alianza que le permitió ser en 2010 el ministro del Interior y Justicia, desde donde lideró grandes reformas al Estado desde el Congreso. En 2012, pasó a una cartera que en nada le unía a la política pero sí a la actividad social: el Ministerio de la Vivienda, en donde estuvo al frente del programa de las 100 mil viviendas gratis

Pero fue en el segundo mandato de Juan Manuel Santos en donde ha llegado a estar más cerca de su sueño. En agosto de 2014 asumió como Vicepresidente de la República, cargo en el que estuvo hasta hace un año, cuando se retiró para aspirar a ser el presidente para el periodo 2018-2022.

Recientemente, al lanzar el libro de sus memorias en la vida pública, 'Hacer, cumplir, avanzar, una vida al servicio de Colombia', Germán Vargas Lleras, con algo de humor, contó cómo ha tenido las vidas del gato. Y es así, en 2002, siendo senador sufrió un accidente acuático en la isla de San Martin, que le dejó fracturas; en 2003 sufrió el primero de dos atentados, este cuando las Farc le enviaron un libro bomba que le explotó en sus manos; dos años después, en 2005, un carro bomba explotó al paso del vehículo en el que se movilizaba. La cuarta vida, dice el hoy candidato, fue ya siendo ministro de Vivienda, cuando el helicóptero en que iba a despegar desde Sandiná, Nariño, tuvo inconvenientes.

Así es Germán Vargas Lleras, uno de los cinco candidatos que este domingo disputan la Presidencia de la República.