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La pelea por la Asamblea del Atlántico estaba reñida, previo a las elecciones el partido Cambio Radical, el cual lideraba en la corporación con 5 escaños, mantenía una posición distante de un triunfo abrazador.

El senador Arturo Char había referido que para estos comicios, la pelea sería dura, puesto que ahora ya no eran 14 las curules a repartir sino 13; ya que tras el Estatuto de la Oposición, el candidato a la Gobernación con la segunda mayor votación tendría un puesto asegurado en la Asamblea, si este lo acepta.

Así las cosas, la aspiración de varios de los partidos políticos era mantener las curules que habían ganado en 2015. Este reto lo pudieron mantener Cambio Radical, el Partido de la Unidad y el Partido Liberal. En cambio, el Partido Conservador redujo su fuerza en la Asamblea, pasando de 4 curules a 2. 

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Cambio Radical se mantuvo como el partido más votado, con el 31,50% de los votos, incrementó su votación con respecto a 2015 (24,43%). Sin embargo, el Partido Conservador que tras los comicios de hace 4 años se mantuvo como una fuerza importante en el departamento, pasó de ser la segunda colectividad más votada a la tercera, con el 12, 12% de los votos.

Expertos ya habían pronosticado una disminución del poder azul en el Atlántico. Previo al certamen electoral, el director del departamento de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales de la Universidad del Norte Angel Tuirán indicó: 'A propósito de los últimos escándalos de Aida Merlano (excongresista conservadora hoy prófuga de la justicia) y del retiro del exsenador Roberto Gerlein es posible que sufra una disminución en la representación de concejales y diputados'.

No obstante, aunque la fuerza azul disminuyó mantuvo la participación y se quedó con 2 curules, las mismas que tendría el Partido Liberal, aunque los primeros con mayor votación (12,12%).

La colectividad roja tenía como meta mantener las dos curules y pelear por una tercera. Logró mantenerse con los mismos resultados, lo cual representa un reto por la disminución de las curules que estaban disputando.

De otro lado, está el Partido de la U, el cual aunque mantuvo el mismo número de curules (3) de 2015, mejoró sus resultados. Pasó de ser la tercera fuerza más votada, en 2015, a la segunda en 2019 con el 14, 60% de los votos.

Las dos curules que perdió el Partido Conservador quedarían repartidas así: 1 para el Centro Democrático, partido que entraría a la corporación por primera vez, y otra que pasaría a ser de la coalición Colombia Humana Atlántico, tras la votación de Nicolás Petro.

Lo anterior, modificaría de manera interesante las fuerzas que ejercen control desde la Asamblea. Ya que por un lado, el uribismo habría logrado abrirse paso en la corporación de un departamento en el que no ganó el presidente Iván Duque, del mismo partido, y tampoco el no al plebiscito, que impulsó el líder del Centro Democrático Álvaro Uribe Vélez.

Así mismo, otro dato susceptible de análisis, sería la entrada de una fuerza opositora a la corporación en cabeza de Nicolás Petro, el hijo del excandidato presidencial Gustavo Petro, quien a pesar de haber ganado en el Atlántico en primera y segunda vuelta, tal votación no se vio reflejada en el movimiento que lidera, la Colombia Humana.

Vale la pena resaltar, que el excandidato a la Gobernación Nicolás Petro, según el Estatuto de la Oposición, podría o no aceptar la curul que se ganó.

Estos son los nuevos diputados

- Cambio Radical: Gersel Luis Pérez Altamiranda, Gonzalo Dimas Baute González, Welfran Junior Mendoza Torres, Estéfano Raúl González Díaz Granados y Santiago Miguel Arias Fernández. (

- Partido de La U: Lissette Karina Llanos Torres, Freddy Pulgar Daza y Lilia Esther Manga Sierra. (repiten mujeres)

- Partido Conservador: Federico Antonio Ucrós Fernández y Merly del Socorro Miranda Benavides. (Repiten)

- Partido Liberal: David Ramón Ashton Cabrera y Lourdes del Rosario López Flórez. (Repiten)

- Centro Democrático: Miguel Ángel Ramos Escorcia.