Una treintena de congresistas que componen la Bancada Caribe le pidieron este martes al presidente Iván Duque 'que se le ordene a quien corresponda el cumplimiento estricto de lo contratado a través de Findeter, para que de una vez por todas la Zona Portuaria de Barranquilla tenga un calado óptimo de 10,20 metros'.
Esto porque, señalan los legisladores en una carta, a pesar de los esfuerzos liderados por el actual gobierno en dar una solución que le brinde estabilidad y competitividad a la Zona Portuaria de Barranquilla, en donde para este año se invirtieron de manera oportuna más de $23.000 millones en un contrato para el dragado permanente, 'los resultados obtenidos a la fecha han estado lejos de lo esperado y de lo contratado a través de Findeter'.
Así mismo, solicita la bancada multipartidista que se acelere la puesta en operación de la APP del Río Magdalena, ya que 'viene sufriendo repetitivas demoras en su estructuración y aún no se tiene una fecha cierta sobre la apertura de la licitación'.
Recuerdan en el primer punto que el contrato de dragado tiene como objeto el mantenimiento del canal navegable en su totalidad a través de la remoción de hasta 1.865.000 m3 de sedimento que deben permitir, según canal de diseño, que se establezca un calado óptimo de 10,20 metros.
'Firmada el acta de inicio el 6 de marzo del presente año, transcurridos más de ocho meses desde el inicio del dragado y habiendo removido el 86% del volumen contratado, este calado no se ha obtenido ni un solo día, aun cuando las condiciones climáticas han permitido dragar sin interrupciones desde el segundo trimestre del año', se lee en la misiva.
Además, ponen de presente que el calado operativo ha sufrido inestabilidades que han ocasionado desvíos de embarcaciones (12 desvíos durante la vigencia del contrato, registran), demoras en los ingresos, sobrecostos en fletes por buques con capacidad ociosa y otros contratiempos que le han ocasionado a la cadena logística y productiva asociada a los servicios portuarios, sobrecostos e ineficiencias valoradas en más de USD $4.000.000.
'Lo anterior genera incertidumbre en importadores de la región, exportadores, líneas marítimas, armadores internacionales que golpean la imagen de la ciudad y la competitividad de su aparato productivo y comercial', critica la bancada de congresistas costeños.
Recientemente, indican, la Dimar volvió a restringir el calado a 9,30 metros y siguen las restricciones en algunos sectores de 8,50 metros, 'muy por debajo de los 10,20 metros estipulados en los documentos contractuales. Este contrato tiene vigencia hasta el 31 de diciembre del presente año, y no se ve que, finalizado el mismo, se pueda obtener la estabilidad que se quiso dar cuando se asignaron los recursos y se adjudicó el contrato'.
Frente al segundo punto, el de la APP del Río Magdalena, dicen que después de dos años de planteado el fortalecimiento de la estructuración de este proyecto, este 'no se encuentra totalmente estructurado técnica, jurídica ni financieramente y por ende no se han iniciado los trámites de aprobación y asignación de vigencias'.
Agregan que las fechas de apertura de la licitación se han venido postergando 'y por tal dilatando obras importantes para la ciudad como la reparación de los tajamares y las protecciones de orilla que le den estabilidad al canal navegable'.
Y concluyen en su carta al jefe de Estado que la competitividad de la ciudad, su reactivación económica y su crecimiento, dependen en gran parte de la estabilidad y sostenibilidad de su sector portuario y logístico.