El pasado lunes fue radicada en la Comisión Primera del Senado la ponencia del tercer debate de la reforma política qué trae, entre otros temas, la financiación mixta de las campañas electorales.
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La financiación será “preponderantemente pública”, pero se deja abierta la posibilidad de financiación privada: “Serán financiadas parcialmente con recursos estatales mediante anticipos, reposición de gastos y financiación estatal indirecta de algunos rubros que incluirá al menos la propaganda electoral y la franquicia postal de conformidad con la ley”.
Así mismo, la elección de los magistrados del Consejo Nacional Electoral, CNE, la realizará el Congreso de ternas presentadas por las altas cortes: “La elección de los magistrados se realizará por el Congreso en pleno, por mayoría absoluta, de tres ternas remitidas por la Corte Constitucional, tres ternas de la Corte Suprema de Justicia y tres ternas del Congreso de la República. En todo caso, las ternas de elegibles serán conformadas por convocatoria pública”.
El debate está agendado para este martes en la célula legislativa de asuntos constitucionales de la cámara alta, aunque antecede a la reforma política la reforma estatutaria a la salud, planteada por Cambio Radical.
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Al respecto, el senador Humberto de la Calle, de la Coalición de la Esperanza, advirtió que “el verdadero problema en Colombia es el dinero negro que proviene de organizaciones criminales y la lógica que se está empleando en el proyecto es prohibir la financiación transparente donde hay deficiencias, pero resulta que el problema de fondo no está siendo tocado. (...) Se confunde el problema de la plutocracia en las campañas con el problema de la financiación ilegítima, indebida, impregnada del narcotráfico. La mejor solución para evitar la plutocracia es la que ya tiene Colombia, que es la de establecer topes a la financiación privada y controles al gasto”.
De otro lado, el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, argumentó que “si seguimos eligiendo en Colombia como elegimos hoy, en las diferentes corporaciones públicas, en gobernaciones y alcaldías, estaremos repitiendo los mismos episodios. (...) Tenemos un sistema político que no funciona y con financiación exorbitante, protagonista de escándalos y no hacemos los cambios que se requieren: el llamado es a un gran acuerdo nacional”.
