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Este martes, tras la detención del expresidente y senador Álvaro Uribe, el presidente Iván Duque salió en defensa de su mentor político y pidió que este pudiera ejercer su defensa en libertad.

La Corte Suprema de Justicia ordenó la medida de aseguramiento del senador en el proceso que se surte en su contra por presunto soborno de testigos. No obstante, este miércoles el jefe de Estado volvió a salir en defensa del líder de su partido, Centro Democrático.

Ante esto, los pronunciamientos del presidente han despertado un debate sobre si se habría extralimitado o no en sus funciones como jefe de Estado al exponer tales peticiones en el caso del senador Uribe.

Jairo Libreros, profesor de la Universidad Externado de Colombia y analista político, dijo que el presidente Duque se ha extralimitado en dos momentos: ayer (martes) durante la ronda de medios radiales a nivel nacional y este miércoles.

'Desconoce el equilibrio de poderes y es una afectación; ya que le quita garantías a los jueces de juzgar en un ambiente libre de apremios por parte del Legislativo o Ejecutivo', expresó Libreros.

El analista refirió que el presidente primero solicitó que cualquier decisión que se adopte en el caso no estuviese relacionada con la detención de Uribe, que pudiera defenderse en libertad, y, segundo, pidió aplicar el 'principio de honorabilidad'.

'Eso es aún más grave, ha salido a hablar de un concepto inédito que no tiene antecedentes legales ni está en el Código de Procedimiento Penal. Habló de la presunción de honorabilidad como un principio a tener en cuenta en el caso de Uribe', manifestó.

Libreros aclaró que ese término es novedoso y no tiene respaldo en la Constitución Política de Colombia ni es legal.

Según el profesor de la Universidad externado de Colombia, el presidente envía un mensaje contrario a la legitimidad y legalidad que adoptan los jueces en Colombia

'Dejan muchas dudas del perfil democrático del presidente, se equivoca y le quita legitimidad a las propias instituciones que juró defender', señaló el analista.

Sin embargo, otra es la percepción del profesor de la Universidad Central Álvaro Forero.

'El presidente ha expresado su solidaridad con un político, que era de esperarse, porque comparten muchas ideas, son del mismo partido y se refiere a alguien que ha liderado ese sector de la opinión, no me parece que haya sido una intervención contraria al respeto a la justicia', manifestó.

No obstante, Forero agregó que se esperaría que el mandatario fuese prudente. 'Una función del presidente es ser prudente en sus pronunciamientos. Pero, por el momento, en lo que ha dicho considero que no ha incurrido en una falta o que esté ejerciendo una presión indebida de la justicia'.

Además, manifestó que no se le debería impedir expresar su opinión, aunque sí advertirle que debería ser más prudente.

En el caso de otros funcionarios de la Casa de Nariño que han salido en defensa del senador Uribe, Forero señaló: 'No deben participar en política ni hacer comentarios que los comprometan, de algún modo, con la participación en esta. Eso sí es inapropiado. El presidente representa a la nación, pero es un líder de opinión, tiene un tratamiento más flexible. Pero sus funcionarios sí deben limitarse a la norma jurídica que señala que ellos no deben intervenir en política'.

El presidente hizo la claridad de que entiende el papel de las instituciones y la independencia de poderes, pero que hacía la petición de libertad para Uribe como ciudadano.

'Como presidente, hago un llamado a la reflexión; entiendo el papel de las instituciones y la independencia de poderes. Como ciudadano y creyente en las instituciones, espero que las vías judiciales operen, y que existan plenas garantías para que un ser humano íntegro ejerza a plenitud su defensa en libertad', dijo Duque el pasado martes.