BOGOTÁ. Ha sorprendido el aparente viraje que ha tenido el nuevo ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, en torno a la propuesta de una constituyente que plantea el presidente Gustavo Petro, pues antes la cuestionaba y ahora parece matizarla.
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Una vez se conoció la proposición, hace unos meses, el entonces líder del Partido En Marcha, publicó un video calificándola como una 'mala idea' e 'inviable', y agregando que 'no debe ser un instrumento para resolver las tensiones entre el Gobierno y el Congreso. La idea de la constituyente no se debe usar como una amenaza al Congreso para que apruebe las reformas'.
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Pero el pasado lunes, al aceptar la cartera política, aseveró: 'Asumo cuatro propósitos fundamentales: primero, la búsqueda de un acuerdo nacional de verdad que permita explorar hacia el futuro la posibilidad de invocar una constituyente bajo los parámetros de la Constitución del 91, es decir que sea fruto de un acuerdo nacional, y vamos a abrir un diálogo con todos los sectores, con amigos y de oposición, altas cortes, Congreso, organizaciones sociales, gremios y empresarios, a ver si logramos un acuerdo que puede o no terminar en una constituyente y que si llegamos a un acuerdo se elegiría en un próximo gobierno. Ese diálogo se iniciará la próxima semana'.
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Al respecto de esta aparente disyuntiva, el ex ministro del expresidente Juan Manuel Santos dijo en la emisora Blu Radio que sigue considerando inviable una asamblea constituyente sin un consenso nacional, pero no descartó una constituyente acotada para abordar reformas concretas.
“Una Constituyente no es posible en Colombia sin un acuerdo nacional, y menos aún durante el periodo del presidente Petro. (...) El proceso de reformas debe ser fruto de un diálogo amplio y abierto, similar al que se llevó a cabo hace más de tres décadas para la Constitución del 91', indicó el ministro entrante.
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Y concluyó que 'es un proceso de diálogo abierto que permita que este país asuma sin timideces cuáles son las reformas que se tienen que hacer y si es posible utilizar la Constitución Nacional para hacer una constituyente acotada a unos temas que están necesitando reforma en el país y que están bloqueados hace tiempo en el Congreso de la República y en el país en general'.
'Las especulaciones de una constituyente por decreto son absolutamente inconvenientes, inconstitucionales y sin pies ni cabeza. No hay ninguna posibilidad en Colombia de convocar una constituyente si ella no es fruto de un acuerdo nacional, que es el que vamos a buscar, a ver hasta dónde somos capaces de llegar. (...) El mandato que me ha dado el presidente de la República es iniciar contacto con los partidos políticos, con los gremios, con los empresarios, con las organizaciones sociales, para estudiar la posibilidad de una Asamblea Nacional Constituyente acotada”, puntualizó.
