En las últimas horas se hicieron virales dos videos en los que se ve a varias mujeres, entre influencers y modelos, disfrazadas con la indumentaria de Vive 100 y Bonice vendiendo estos productos en las calles, con el fin de ayudar a los vendedores ambulantes, en su mayoría adultos mayores, que no habían podido vender nada en su día de trabajo.
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Bonice y Vive 100 son dos de los productos más conocidos en el país, gracias a que su distribución se da de forma masiva en las calles de Colombia.
Estas marcas son distribuidas por cientos de vendedores ambulantes, creando así una cercanía con los colombianos y convirtiendo estos productos en símbolo de la identidad nacional, incluso trascendiendo de generación en generación.
Estas barras congeladas y bebidas energetizantes hacen parte de la cultura popular de los colombianos, pues en muchos casos traen recuerdos de la infancia a la población, creando un lazo emocional. Sin embargo, estos productos se están agotando en el país.
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La producción y comercialización de ambas marcas ha generado un impacto significativo en la economía de Colombia, desde el empleo que genera a miles de trabajadores en las fábricas hasta el dinero que pueden reunir los vendedores ambulantes en las calles.
Además, Bonice y Vive 100 han incentivado actividades sociales, campañas de apoyo a comunidades vulnerables y programas de reciclaje.
No obstante, estas marcas han recibido muchas denuncias por el bajo pago que les ofrece a los vendedores en las calles, principalmente a personas de la tercera edad, encargadas de distribuir estas bebidas, y aún así continúan en el mercado.
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El emotivo gesto de las influenciadoras generó comentarios positivos por parte de los internautas, quienes aplaudieron el gesto de las mujeres, que vestidas con los logos de las marcas y sus atributos físicos lograron que los vendedores ambulantes cumplieran su meta del día, y además les obsequiaron a los trabajadores una ancheta con productos de la canasta básica.
