Centrales obreras, profesores y estudiantes, a nivel nacional, salieron a las calles a protestar en contra del Plan Nacional de Desarrollo, PND, la falta de inversión y el asesinato de líderes sociales.
El Gobierno , por su parte, ha dicho que las marchas tienen tintes políticos e ideológicos de oposición.
Por su parte, la ministra del Interior, Nancy Patricia Gutiérrez, que negoció un acuerdo con los indígenas del Cauca, dijo a EFE que la huelga nacional 'es una estrategia política de los sectores de oposición para generar la sensación de falta de gobernabilidad'.
En el mismo sentido, la vicepresidenta Marta Lucía Ramírez afirmó que 'no hay motivos para estar protestando, sino para estar trabajando'.
Esto porque, según la vicepresidenta, el país 'está mejorando'.
'Colombia no para de estar creando, trabajando, no para de estar soñando que el país sea mejor, por eso me parece que no se justifica querer mantener el país en modo protesta social, eso lo que hace es que destruye riqueza, acaba empleos y le va destruyendo la esperanza a muchos colombianos', puntualizó.
Sin embargo, Ramírez manifestó que la protesta debe ser respetada por todos los gobiernos, ya que 'está consagrada en la Constitución y es una manera de expresar descontento'.
No obstante, aclaró que estas deben realizarse de manera pacífica y respetando la ley.
'#ColombiaNoPara y de ninguna manera vamos a permitir que Colombia fracase. Nosotros no vamos a parar en trabajar con los colombianos para cumplir la ilusión de sacar adelante a este país', trinó la vicepresidenta.
Además, la funcionara dijo que desde el Gobierno permanece abierta la puerta del diálogo.
'Se debe promover el diálogo con todos los sectores y buscar escenarios de solución a los problemas nacionales', reiteró.
De esta manera, aunque el Gobierno dice apoyar la protesta social no está de acuerdo con el paro nacional de diferentes sectores.
Incluso, Ramírez enfatizó en decir que esta 'se haga cuando realmente hay motivos para hacerlo y no para mantener al país en modo protesta, tratando de desgastar a un gobierno, un sistema económico y la sociedad'.
Pese al llamado de la vicepresidenta, decenas de miles de trabajadores colombianos suspendieron ayer sus actividades para sumarse a una huelga nacional de 24 horas convocada por las centrales obreras en contra de las políticas económicas y sociales del presidente Iván Duque.
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