Luego de 15 días de haber ocurrido la masacre de Chimá, en el departamento de Córdoba, donde perdieron la vida el ganadero Esteban Urueta González y sus trabajadores Fredy Beleño Acosta y Gerardo de los Santos Marzola, la Mesa Sucreña por la Paz se pronunció.
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A través de un comunicado a la opinión pública este espacio de coordinación y articulación de la sociedad civil del departamento de Sucre, condenó el vil asesinato del que a su vez aseguran no tener precedentes por sus altos niveles de crueldad y sevicia.
Al tiempo expresan su solidaridad a las familias de las víctimas, y reclaman “un castigo ejemplar a los perpetradores de tan horrendos crímenes, cero impunidades”.
A propósito de los autores de esta masacre, de momento solo responden por ella ante las autoridades Cristian Mauricio Petro Almanza y su amigo Juan Fernando Soto Garcés. El primero, de 28 años, era desde hacía 7 el socio de Esteban Urueta en los negocios de ganadería y justamente habría hecho mal uso de esas reses, unas 700, que no estaban en los corrales y eso fue lo que salió a verificar el martes 10 de septiembre el ganadero sincelejano Esteban Urueta y sus mayordomos y los tres terminaron pagando con sus vidas.
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Los confesos partícipes en esta masacre rinden interrogatorio de indiciados ante la Fiscalía que este viernes 27 de septiembre a partir de las 10:00 de la mañana les imputará cargos.
