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Atlántico, Bolívar, Cesar y La Guajira son los departamentos de la Región Caribe que se están preparando para recibir a los colombianos repatriados y deportados de Venezuela. Medicamentos, alojamiento y alimentos son algunas de las medidas que contemplan como 'ayudas inmediatas' para solventar una situación cada vez más apremiante.

En la tarde de ayer la administración departamental de Atlántico se reunió con Migración Colombia y otros entes territoriales, para decidir cuál será el plan de contingencia. Darling Isáziga, secretaria del Interior, indicó que fue activado un ‘Puesto de mando unificado’ con sede en las oficinas de Migración Colombia (carrera 42 N°54 - 77) donde serán atendidos los casos de deportados y repatriados, 'donde se les hará una caracterización para determinar la clase de ayuda que necesitan'.

Este puesto dependerá de la información que envíe la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo, que se encuentra en la frontera con Venezuela estableciendo un censo para determinar cuáles son los destinos de quienes cruzan y remitirlos.

Hasta el momento se conoce que de Atlántico hay 107 deportados, 3 expulsados y 9 niños.

Bolívar

La Gobernación de Bolívar dio a conocer que son estudiadas algunas medidas a raíz de la posible llegada de deportados o repatriados. Según Federico García, secretario del Interior de Bolívar, un representante de la Unidad de Gestión de Riesgo Departamental asistió ayer a una reunión convocada por el Gobierno, a través de la Unidad Nacional de Riesgo, para 'conocer el plan de choque y las acciones diseñadas'.

Cesar

En el Cesar preparan un plan de acción para atender las familias que se espera lleguen deportadas desde Venezuela. Ayer se reunieron delegados de la Procuraduría Regional, la Defensoría del Pueblo y la secretaría de Gobierno de Valledupar para ir definiendo estrategias como la ubicación de albergues temporales donde serán recibidos. Carlos Céspedes, secretario municipal de Gobierno indicó que ya hay seis familias registradas.

La Guajira

En La Guajira se conformó una ‘Sala de Crisis’ cuya mesa principal estará en la estación de Policía de Maicao y una avanzada en el corregimiento Paraguachón, cerca a la frontera. El primer contacto es con Migración Colombia, después de eso los deportados son llevados hasta un centro médico donde son atendidos. Después cada quien informa el sitio de su destino y se procede a entregarle el transporte y alguna ayuda.