Con ponencia del magistrado Luis Manuel Lasso Lozano, el Tribunal Administrativo de Cundinamarca, sección Primera, admitió la demanda con fines de indemnización contra el Estado, presentada por familiares de las víctimas del siniestro de Fundación (Magdalena), donde 33 niños y una mujer murieron quemados, hace dos años, tras incendiarse el bus en el que viajaban.
La acción fue interpuesta por un colectivo de abogados en representación de 17 de las 34 víctimas, quienes exigen al Estado reparación directa por los perjuicios morales que la tragedia produjo en sus vidas.
Sostienen que hubo presunta omisión en la vigilancia y control por parte del Ministerio de Transporte y la Policía Nacional, además de otras entidades estatales, a saber las gobernaciones del Atlántico y Magdalena, el Distrito de Barranquilla y el municipio de Fundación.
Para los abogados, la falta de control del Ministerio de Transporte a la hora de regular esta clase de vehículos puso en riesgo a los menores. Es de anotar que el bus carecía de Soat y certificado de revisión técnico mecánica, logrando llegar de Barranquilla ¬–donde fue comprado ya viejo– hasta Fundación –donde prestaba servicio de transporte público–, sin que autoridad alguna lo detuviere.
La información conocida por EL HERALDO señala que la indemnización ascendería a $10 mil millones.
Condenas
El 22 de octubre pasado se había pasado una página de este caso, conocido como la tragedia de Fundación, luego que el juzgado 1ro. Penal del Circuito de Ciénaga condenó al conductor del bus, Jaime Gutiérrez Ospino, a 10 años y 11 meses de prisión, y al líder religioso Manuel Salvador Ibarra, a 10 años y 8 meses, por el delito de homicidio culposo.
A los anteriores se les negó cualquier beneficio de suspensión condicional de la ejecución de la pena, como tampoco se les otorgó la prisión domiciliaria como medida sustitutiva de la reclusión intramural.
Mientras tanto, las autoridades buscaban a Alfredo Cruz Esquea Chavez, dueño del bus del siniestro, quien se encuentra prófugo. Transcurridos cuatro meses de la tragedia, Esquea fue capturado en Venezuela y entregado a Migración Colombia. Al siguiente día ya estaba recluido en la cárcel.
El proceso dio un viraje el 26 de noviembre del 2014, luego que el juzgado penal del circuito de Fundación le otorgó libertad condicional. Los abogados de víctimas apelaron la decisión y, luego de analizar los recursos, el Tribunal del Magdalena ordenó el 24 de abril del año pasado su recaptura.
