El poeta Abel Rivera García lo llamó en sus versos 'centinela forestal de los samarios', e inspirado en su grosor y frondoso follaje, le escribió:
'Imperturbable ante el viento, la lluvia y la sequía, revistes tus ramas con aguzados brotes de tiernas hojas coloridas, que agitadas por las brisas saludan la primavera'.
Es el centenario árbol la ‘Bonga de Corpamag’, llamado así porque está sembrado en el parqueadero del ente ambiental, situado en inmediaciones del barrio Tayrona, en el nororiente de Santa Marta.
El palo –que según el mismo poeta 'como un gigante verde se levanta a los cielos'– permanece enfermo y en riesgo de morir. Su condición fitosanitaria no es la mejor y a tono con las circunstancias del momento 'está en uci'.