A las 4 a.m. de ayer el general (r) Manuel José Bonett Locarno llegó al Palacio Tayrona, sede de la Gobernación del Magdalena, para desarrollar sus funciones como encargado en la misma oficina que Ana Lucila Herrera no le quiso entregar pocas horas antes, por considerar que era a ella a quien le correspondía por haber sido designado por el mandatario titular suspendido, Omar Diazgranados.
Con lo que no contaba la odontóloga y secretaria de salud del Departamento era que la noche del miércoles, a eso de las 11:45, luego que considerara quizás que había ganado una batalla, el ex general militarizara la edificación.
Con policías y soldados adentro, en la madrugada, Bonett entró, organizó su agenda de trabajo y llamó a sus colaboradores. A las 7:30 a.m. salió, y una hora y media más tarde regresó. Lo primero que hizo fue convocar un consejo de gobierno, al que no asistió la Secretaria de Salud.
El gobernador Bonett lamentó que su llegada al despacho se haya dado de esta manera y dijo que lo que Ana Lucila Herrera estaba haciendo era “una terquedad”, ante lo que agoté toda mi persuasión y diplomacia”. Agregó que en ningún momento pensó en actuar con fuerza y menos contra una dama.
¿Por qué tan temprano?, ¿esa será su hora de llegada siempre?, se le preguntó al exmilitar. “Mi papá trabajaba en una finca ganadera cerca de Sevilla y allá me crié; por eso tengo horario de ordeñador”, fue la respuesta.
Manuel Bonett aseveró que lo que más le interesaba ayer por la mañana era asegurar el Palacio Tayrona, pero con presencia militar disuasiva. Argumentó que utilizó esa vía porque había que mostrar que el Estado tiene sus capacidades. “Una cosa es que yo emplee la conciliación y otra es que tenga que contar con los medios que me da el Estado para la tranquilidad del Palacio”.
TROPIEZOS CON PERIODISTAS. En un comienzo la Policía, recibiendo orden del Gobernador, trató de impedir el acceso de los periodistas al segundo y tercer piso del edificio, lo que incomodó a los comunicadores quienes protestaron.
También se divulgó una circular firmada por el Secretario General, en la que les informaba que “para entrevistas con el gobernador Manuel José Bonett, es preciso que esta sea solicitada en la Secretaría del despacho para dar trámite a dicha solicitud”.
Enterado el Gobernador de los anteriores tropiezos con la prensa, dijo que esa no había sido orden suya y que hicieran caso omiso.
Diazgranados Vs Vargas
En Bogotá el gobernador suspendido, Omar Diazgranados Velásquez, rompió el silencio y arreció su crítica contra el ministro del Interior, Germán Vargas Lleras. “Mientras que el decreto que expedí no se derogue por autoridad competente, Ana Lucila Herrera es la gobernadora”, dijo.
“En estos momentos se está cumpliendo un atropello desaforado por parte del Ministro del Interior”, precisó.
Vargas Lleras desestimó esas declaraciones y dijo que Bonett va a recomponer el equipo de gobierno, al tiempo que denunció que antes de su llegada, “funcionarios de la Administración sustrajeron documentación valiosa de la Gobernación”.
En Santa Marta, Herrera dio un viraje en su posición y afirmó que “hay un gobernador que está allá en el Palacio Tayrona… yo soy la Secretaria de Salud”.
Por Agustín Iguarán
Santa Marta.
