El gobernador de La Guajira, Juan Francisco Gómez Cerchar, está en la política desde 1992, cuando fue concejal de Barrancas el municipio donde nació y que queda al sur del departamento. También fue alcalde de la población de 1995 a 1997 y de 2001 a 2003.
Sin embargo, desde que entró en la vida pública, ha estado salpicado con acusaciones y denuncias, cuyas investigaciones no prosperaron en los estrados judiciales. Sí estuvo preso pero fue en 1991 por un allanamiento realizado por las autoridades en que le encontraron varias armas sin los respectivos salvoconductos.
En esa oportunidad solo fueron dos meses que estuvo privado de la libertad, pero un familiar suyo sí quedó preso.
Al mandatario guajiro se le acusó primero de la muerte del concejal Luis López Peralta, quien denunció que Kiko Gómez estaba detrás del incendio a la oficina jurídica de la Alcaldía de Barrancas .
López fue asesinado el 27 de febrero de 1997, cuando dos hombres entraron a su oficina que quedaba en un hotel y le dispararon. Este fue uno de los delitos por los cuales se produjo la captura del gobernador ayer en Barrancas.
Dentro de las denuncias contra Gómez Cerchar está el asesinato de Wilson Martínez, secretario de Gobierno y periodista de Fonseca, quien lo acusó de utilizar los recursos del municipio para gastos personales. Según la Fiscalía después de esto el 6 de abril de 2001, Martínez fue encontrado muerto en la vía que va de Fonseca a Barrancas, luego que desconocidos de lo llevaron de su casa y le dispararon a un hermano suyo. Tras su segundo periodo en la Alcaldía, que terminó en 2003, Kiko Gómez tiene aún activas tres investigaciones en la Fiscalía por peculado y una por prevaricato.