No hubo angustias de ninguna clase. Nadie cruzó dedos, ninguno acabó con sus uñas. Junior, como hace rato no sucedía, se impuso con claridad y contundencia 4-0 al Jaguares, anoche en el estadio Metropolitano Roberto Meléndez, en partido de la quinta fecha de la Liga Águila.
Nada de matar al Jaguar y tenerle miedo al cuero.
Los Tiburones se comieron vivo a su rival desde el pitazo inicial. Ganaron, gustaron y, lo que parecía imposible en los tres primeros partidos, ¡golearon!