Sebastián Viera se desahogó. El arquero y capitán de Junior habló del mal momento del equipo y de todas las versiones extraoficiales, chismes, especulaciones y rumores que lo señalan de liderar un supuesto complot en contra de Alberto Gamero, técnico saliente.
El uruguayo dice que está tan dolido que pensó en renunciar y dejar todo tirado. 'Acá no hay sindicato ni rosca ni rosca ni nada', dijo Sebastián Viera ante unos escasos medios que lo abordaron en un salón del edificio donde vive, en el norte de la ciudad.
Viera declaró que su relación con Gamero era muy buena y que le extrañó que en la entrevista que el DT concedió a EL HERALDO no aclarara de manera contundente que no existía ningún tipo de complot.