El despertar del lunes fue más emotivo. Juan Sebastián Herrera abrió los ojos a las 5 de la mañana y 30 minutos después ya iba rumbo a la conquista de su sueño: jugar en el Junior. Herrera, delantero bumangués, es uno de los jugadores que ascendió Julio Comesaña al equipo Tiburón para el segundo semestre.
Los 15 goles que conquistó Juan Sebastián con los rojos de Curramba (en dos temporadas) fueron la mejor carta de presentación del atacante juvenil que está seguro que con Junior también ratificará su poder goleador.
'En el último tiempo he venido marcando muchos goles en el Barranquilla, he tenido bastante continuidad, se hizo una labor importante. Vengo con mucha certeza de que las cosas me van a salir bien. No será fácil, pero no es imposible. Hay que venir con toda a aportar. De hacer valer por qué me subieron', sostuvo ayer el delantero al final de su primer entrenamiento con el cuadro rojiblanco.
Herrera ya sabe lo que es jugar en la primera división por eso dice que el reto de estar en Junior no le quedará grande. También tiene claro que llegó a un equipo exigente y él espera mostrar una buena regularidad. 'Tuve un paso por la ‘A’ con Alianza Petrolera y tuve la fortuna de marcar goles. Se me da esta oportunidad nuevamente y no pienso desaprovecharla. Vengo a un equipo grande y acá no se da espera. Voy a luchar por dar ese buen rendimiento y por ganarme un puesto', remató.
En la primera práctica, Sebastián Viera bautizó a Herrera como Teófilo Gutiérrez por su parecido físico con el barranquillero.