César Farías ya dijo que no se va a casar con ningún esquema. Si algo sale como él no quiere va a cambiar. Y ahora que solo tiene a Emanuel Olivera, Nicolás Olivera y Howell Mena como únicos defensores centrales naturales disponibles, el estratega aseguró que todavía tiene en mente utilizar una línea de tres defensores atrás así como utilizó ante Independiente Medellín.
Así lo dio a conocer este martes en una rueda de prensa en la sede deportiva Adelita de Char, en la que dijo que ya ha pensado en varios nombres que pueden actuar como zagueros en caso de alguna emergencia.
“Ustedes no vinieron ayer (lunes), pero ayer trabajamos toda la parte defensiva y trabajaban desde los delanteros. Hoy (martes) vinieron y vieron a todos atacando, entonces pensamos que es una labor de equipo, que es cohesionar, es agrupar. Queremos un equipo capaz y que tenga flexibilidad táctica y aprenda a manejar distintos sistemas. De local le ha ido muy bien con el 4-2-3-1, también con el 4-3-3, seguramente veremos mucho de eso, también en la escasez esa, pero no se olvide también que aquí hay jugadores técnicamente y con el biotipo de poder hacer ese trabajo, porque nosotros no hablamos de esa línea de 3 para defender, sino para dar mejor salida de juego y para atacar consigo desde el fondo, porque cuando se te meten atrás es difícil y tienes que sorprender, tienes que generar diagonales que traen incertidumbres para la defensa contraria, tienes que traer cruces, permutas y rompimiento de línea”, declaró.
“Nosotros le decimos a los centrales y le insistimos, pasas la mitad, pisa el área, que llega de sorpresa y no tiene referencia de marca, entonces (Andrés) Colorado puede jugar ahí, puede jugar ahí el Yani (Quintero) también sin ningún tipo de problema, (Didier) Moreno puede jugar ahí, (Jhon) Navia puede jugar ahí, porque son jugadores con la riqueza técnica y la velocidad, la flexibilidad con buen biotipo. También en algún momento, cuando ya el equipo esté en la forma que uno quiera, a mí no me desagrada un 3-4-3, pero los de afuera no de carrilero, sino que terminen siendo volantes ofensivos, como intentamos el otro día un poco con Yairo (Moreno), cuando tienes dos jugadores de esa característica y un partido local, también estás sumando gente arriba para meterlo en el último cuarto y jugar la pelota”, complementó.
El venezolano también dejó en claro que su misión es ganar partidos y no dar clases de fútbol a nadie.
“A mí me gusta hablar de fútbol, pero repito, yo aquí no quiero venir a dar clases de fútbol más allá de que tenga 30 años en esto, que he dedicado mi vida a esto, ni tampoco quiero tener una hoja más que el libro, sino es lo que yo visualizo e intento que los equipos tengan las herramientas necesarias de poderlo desarrollar. Después hay que ir a la realidad y la realidad es que hay que ganar partidos y la realidad es que hay que jugar y demostrar dentro de la cancha y ya a esta altura de mi carrera no estoy para eso, estamos para tratar de hacer crecer un equipo que tiene esa necesidad, porque tiene todo para ser un equipo que pueda llegar a la final”, manifestó.
Por último, César Farías se refirió al rumor que existía sobre que Diego Giancarlo Jamik Umaña Lasso, hijo de Diego Umaña, sería su asistente en Junior.
“Carlos es un gran amigo, conocido ahora en el fútbol colombiano. Va a mi casa, comparte con nosotros, pero no, eso no es cierto. Carlos, más bien, se está tratando de ayudar para que sea entrenador, tiene una gran escuela de su padre, se ha acercado a nosotros también y a veces a la gente se le tiene prejuicio por el pasado histórico, el profesor Umaña es un ganador, que tiene carácter y hay gente que le ha puesto una cruz. A mí me gusta respetar mucho a la gente del fútbol, a la gente que tiene años en esto, por eso mencionaba lo de Faryd (Mondragón), porque no era solo el juego, sino porque es personalidad del fútbol sudamericano. Carlos me pidió que si podía venir a ver los entrenamientos y aquí obviamente que le abrimos la puerta a cualquier colombiano que quiera ver, pero también no es menos cierto que él es un buen amigo, entonces bienvenido por doble razón, pero no, no es la persona que hemos considerado para el cargo”, concluyó.