Cada vez más, los colombianos son más conscientes de la calidad nutricional de los alimentos que consumen, y por tanto, han venido modificando sus hábitos alimentarios aún a costa del valor comercial de sus preferencias.
De hecho, 84 % de los colombianos consultados por la compañía consultora internacional Nielsen, asegura que su mayor preocupación a la hora de mercar es adquirir productos que no sean perjudiciales para la salud, que sean locales, frescos y orgánicos, una tendencia que es también compartida en toda la región.
De acuerdo con el estudio ‘La Revolución de los Alimentos’, de la consultora internacional Nielsen, 'la salud es una prioridad para el consumidor'. Tanto así que 75 % de los encuestados modifica su dieta para cuidar su salud; 63 % busca perder peso haciendo ejercicio; 80 % selecciona activamente alimentos que los ayuden a prevenir problemas de salud, y 62 % está dispuesto a pagar un precio mayor por productos que los apoyen en sus metas de salud.
Muestra de ello es las preocupaciones por el sobrepeso expresadas por las personas consultadas, teniendo en cuenta las implicaciones que esta tendencia tiene para la salud humana (hipertensión, diabetes, etc.) y los efectos que produce en el comportamiento de las personas, además del gasto que estas enfermedades generan para los Gobiernos, pues el sobrepeso es considerado un problema de salud pública.
Ello obligó, en consecuencia a consumidores, fabricantes y Gobiernos, a tomar acciones inmediatas para contrarrestar el problema.
Hoy existen más de 250 millones de adultos con sobrepeso en Latinoamérica: Brasil con 54 %, México 64 %, Colombia 57 % y Argentina 62 %, un problema que también es cada vez mayor en los niños y menores de edad.