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Satanizada por unos, exaltada por otros, banalizada por la industria del entretenimiento; la marihuana tiene muchos rostros. Uno de estos es de las aplicaciones médicas que en Colombia están reglamentadas por el decreto 613 del 10 de abril de 2017, emitido por el Ministerio de la Protección Social.

En Barranquilla una pionera en el uso médico y científico de la marihuana es la cardióloga Terry Colmenares, que lleva tres años estudiando la planta y reconoce que el costeño todavía es muy prejuicioso cuando se habla de marihuana medicinal. 

'Yo empecé a tener claridad con respecto a sus usos médicos cuando conocí el trabajo de la doctora paisa Paola Pineda, que lleva más de 12 años investigando y desarrollando el tema del cannabis medicinal', anotó Colmenares.

Agregó que el decreto 613 de 2017 es muy claro, 'y reglamenta el acceso seguro e informado al uso médico y científico del cannabis y sus derivados en Colombia'. 

Grosso modo en nuestro país se puede acceder legalmente a la marihuana en dos escenarios: el autocultivo, que no requiere ningún permiso; y a través de licencias que otorga el Gobierno, principalmente para trabajar con la planta, sus derivados y los productos que la contengan. 

Con respecto al autocultivo la norma señala que cualquier ciudadano colombiano, sin necesidad de tramitar una licencia ante el Gobierno, puede tener hasta 20 plantas de marihuana en su poder 'de las que pueden extraerse estupefacientes, exclusivamente para uso personal'. 

Los detractores de la norma argumentan que implica la legalización soterrada de la marihuana, pero una mira amplia revela que también conlleva a que la persona interesada en este tipo de experiencias tiene que asumir las responsabilidades y consecuencias de su gusto. 

Por ejemplo, el ciudadano que desee autocultivar debe como mínimo tener independencia y sostenerse a sí mismo, ya que son muy pocos los hogares colombianos en los que los padres le permitirían a un hijo sembrar y consumir cannabis en la vivienda familiar. Como dice el dicho, él que quiere marrones, aguanta tirones.

Para Colmenares la práctica del autocultivo también implica que el usuario recreativo de marihuana salga de la cadena del microtráfico, porque no necesita de ‘jíbaros’.

Esto representa un duro golpe para el negocio ilícito del tráfico de las drogas, ya que al bajar el número de compradores bajaría la demanda. 

'Ninguna persona que se dedique el autocultivo puede vender, o regalar sus plantas, es para su uso personal y si lo hace se enfrenta a cargos graves de índole penal por tráfico de drogas', puntualizó Colmenares.  

El cannabis como medicina

De acuerdo con el decreto 613 de 2017 para realizar actividades con cannabis diferentes al uso personal, como aplicaciones comerciales o industriales, el ciudadano debe solicitar licecias al Estado.

Por ejemplo, para fabricar ungüentos, jarabes y pastillas. Hoy en día en Colombia existen unos seis distribuidores legales de cannabis y productos derivados de la planta. 

En su consultorio en el norte de Barranquilla la doctora Colmenares trata unos 20 pacientes con cannabis medicinal que adquiere de estos productores legales quienes cumplen los estrictos protocolos y la normatividad gubernamental.

Los pacientes que usan la planta como tratamiento en su mayoría sufren de enfermedades catastróficas como cáncer, VIH, artrosis, síndromeconvulsivo, alzheimer, síndromes depresivos, ansiedad y glaucoma.

Para esta profesional de la medicina la ventaja de la marihuana sobre las demás drogas es que no intoxica al paciente, tal lo hacen los medicamentos que generan efectos colaterales como la tolerancia y la necesidad de dosis cada vez mayores, o afectan órganos como los riñones y el corazón. 

'Para recetarle cannabis lo más importante es que el paciente acepte el tratamiento. El médico siempre debe actuar con ética y ser claro con respecto a los beneficios que espera obtener al recetarlo', explicó la doctora Colmenares. 

Las formas de administración recomendadas por la médica son en aceite, para dosificarlo con exactitud; y la vaporización, que se usa para tratar dolores agudos por su efecto instantáneo. 

'Colombia se está abriendo al uso medicinal del cannabis al punto que en Medellín, en noviembre 24 al 27, se va a desarrollar la feria Expo Medeweed a la que asistirán conferencistas de talla mundial como la profesora española de bioquímica y biología molecular, Cristina Sánchez, que hablara sobre el cannabis en el tratamiento del cáncer del seno', puntualizó Colmenares.